Lo que al principio parecía una anécdota, una sorpresa, tiene visos de convertirse en una realidad tan tozuda como el juego que está demostrando el Atlético de Madrid esta temporada. Los rojiblancos volvieron a hacer gala de su intensidad en el juego para pasar por encima de un deconocido Athletic Club de Bilbao y mantenerse al acecho del FC Barcelona en la clasificación de la Liga, gracias a los tantos de David Villa y Diego Costa.
Para el conjunto del Cholo Simeone, la palabra relajación no existe. Su estilo aguerrido ha dado paso a un equipo intenso en todas las zonas del campo, que cada día combina con mayor precisión y concede menos espacio a su rival. El Vicente Calderón se ha convertido en una habitación de espacios reducidos para los visitantes, que terminan ahogados por el entusiasmo local.
Quien mejor lo ejemplifica es Diego Costa. Atemorizó a todos los defensas en la primera mitad con sus continuas caídas a banda izquierda y dio los primeros sustos a Gorka Iraizoz. El Athletic, que contaba con la baja de Iturraspe en el centro del campo, trató tener el mando del balón en la primera mitad, pero abusó de los balones largos sobre el juego aéreo de Aduriz y un desconocido Beñat se quedó sin ideas ante el incansable trabajo de Gabi y Tiago.
Tardó veinte minutos el Atlético en acelerar el ritmo del choque. Pero cuando lo hizo el partido quedó resuelto en ocho minutos. Una buena jugada por banda derecha permitió a Juanfran llegar hasta la línea de fondo. Diego Costa no llegó a su centro, pero en el centro del área se encontraba David Villa para enganchar la pelota y cruzar el balón a la red de Iraizoz. Con la máquina rojiblanca a pleno ritmo, el Athletic terminó por desaparecer del choque y, ocho minutos más tarde, Diego Costa encaró en el pico del área, recortó ante Morán y definió con un balón cruzado para marcar el segundo gol del partido.
Y este Atlético cuando se pone por delante se convierte en un obstáculo todavía mayor. La segunda mitad podía haber cambiado el aire del equipo de Ernesto Valverde, pero quien volvió a saltar al campo con una intensidad desbordante fue el Atlético. Numerosos acercamientos rojiblancos al área en los primeros minutos de la segunda parte y el ímpetu del Athletic terminó por venirse abajo definitivamente.
Porque lo que vino después fue una sucesión de ocasiones locales que no acabaron en gol por la falta de acierto y las intervenciones de Iraizoz. Muniain, ese futbolista que hace dos temporadas estaba llamado a ser uno de los estandartes del fútbol nacional, despertó a diez minutos del final pero no acertó con la portería de Courtois. Y el Atlético cerró el partido como lo empezó, en el área de su rival, sin escatimar esfuerzos y con esa intensidad que lo hace acreedor de la condición, cada jornada más real, de candidato a ganar la Liga.
Ficha técnica
Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Adrián (Raúl García, m. 72), Tiago, Gabi, Koke; Diego Costa y Villa (Cristian Rodríguez, m. 83).
Athletic Club: Iraizoz; Iraola, Laporte (Albizua, m. 69), Gurpegui, Balenziaga (Erik Morán, m. 37); San José; De Marcos, Beñat (Susaeta, m. 54), Mikel Rico, Muniaín; y Aduriz.
Goles: 1-0, m. 33: Villa, de disparo desde dentro del área. 2-0, m. 41: Diego Costa regatea a un rival y bate por bajo a Iraizoz.
Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (C. Cántabro). Expulsó a Erik Morán, del Athletic Club, por doble amarilla en el minuto 80. Amonestó a los locales Miranda (m. 6), Godín (m. 23), Juanfran (m. 60), Diego Costa (m. 74) y Raúl García (m. 76) y a los visitantes Iraola (m. 27), Muniaín (m. 45) y Laporte (m. 64).
Incidencias: partido correspondiente a la duodécima jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 53.000 espectadores.