El partido del pasado sábado contra el Valencia en Mestalla (2-1) le ha salido muy caro al Espanyol. A los 88 minutos, con 1-1 en el marcador, el árbitro madrileño Del Cerro Grande pitó penalti a favor de los locales al entender que Héctor Moreno cortó con la mano dentro del área un centro de Barragán. El defensa mexicano y Sergio García estallaron y se dirigieron con ira hacia el colegiado y uno de sus asistentes para acabar siendo expulsados.
Ahora, cuatro días después, el Comité de Competición de la Federación Española impone severos castigos a los dos futbolistas blanquiazules. En concreto, sanciona a Sergio García con cuatro partidos y a Moreno con dos.
Y es que el acta del colegiado refleja que García le llamó "sinvergüenza" tras señalar el penalti. En este caso, el Comité ha decidido aplicar el artículo 94 del Código Disciplinario de la RFEF, que señala que "insultar, ofender o dirigirse en términos o actitudes injuriosas al árbitro principal, asistentes, cuarto árbitro, directivos o autoridades deportivas, salvo que constituya falta más grave, se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos".
En cuanto a Moreno, el acta señala que el mexicano fue expulsado con doble amarilla por "dirigirse hacia el asistente número dos, con su dedo índice tocándose su sien repetidamente y diciéndole: 'Estás loco'". Competición aplica en este caso el artículo 117, que estable que "dirigirse a los árbitros, directivos o autoridades deportivas en términos o con actitudes de menosprecio o de desconsideración siempre que la acción no constituya falta más grave, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos o por tiempo de hasta un mes".