Pese a que Pep Guardiola, entrenador del Barcelona, dejó claro que ningún futbolista del Barcelona iba a acudir a la gala de entrega de los Premios Príncipe de Asturias, Xavi Hernández estará en Oviedo para recoger el galardón en nombre de los jugadores de la plantilla. La presencia del capitán culé obedece, además de a la lesión que le impide participar este sábado en el partido ante el Zaragoza, a la intermediación de la Casa Real y del presidente Sandro Rosell.
Según revela El Mundo, el presidente del Barcelona recibió una llamada de la Corona para que al menos un futbolista de la plantilla acudiera a Oviedo a recoger el galardón. Con mucho tacto y sin querer ofender al todopoderoso Pep Guardiola, Rosell se lo hizo saber al entrenador. Visto que Xavi arrastra molestias físicas, el club ha decido mandar al capitán, aunque el principal ausente será David Villa, ídolo de la afición asturiana.
Desde el periódico de Unidad Editorial apuntan a que la máxima prioridad de la directiva de Sandro Rosell es recuperar las buenas relaciones institucionales dañadas en la época de Joan Laporta. Por ello, y tras recibir la llamada de la Casa Real, la máquina institucional se puso en marcha.
Colaboración de Manel Estiarte
Uno de los hombres clave en la intermediación es el ex jugador de waterpolo Manel Estiarte. Además de ser el jefe de relaciones internacionales del Barcelona y presidente del jurado del Príncipe de Asturias, Estiarte mantiene una gran relación con Pep Guardiola. Amigos íntimos desde hace tiempo, el jugador de waterpolo ha sido pieza clave para que el técnico culé cediera, en la medida de lo posible, a las exigencias de las altas estancias.
En el Madrid bastó Florentino
Pese a la negativa inicial de Jose Mourinho, en el Real Madrid las cosas fueron mucho más fáciles. Al igual que el Barcelona, los blancos juegan en menos de 24 horas un partido de Liga, aunque la presencia de sus futbolistas en Oviedo está confirmada desde hace más tiempo. Una llamada de Florentino Pérez a Mourinho bastó para el portugués concediera a Iker Casillas, capitán del equipo y de la selección, permiso para viajar de forma exprés a Guardiola y estar presente en la entrega de premios representando al resto de futbolistas madridistas.
El último en sumarse a esta polémica lista ha sido Sergio Ramos. El andaluz está aquejado de molestias musculares que le han impedido jugar en Málaga, el pasado fin de semana, y ante el Milan este martes. Esta mañana tampoco ha entrado en la convocatoria para el encuentro ante el Racing del sábado, así que ha recibido el permiso para acompañar a su capitán a su capitán a la capital del Principado.