El Bayern de Pep Guardiola, rival del Real Madrid en la semifinal de la Liga de Campeones, cayó por goleada en casa (0-3) ante un Borussia Dortmund que jugó su mejor partido de la temporada y logró asfixiar el juego de posesión de los bávaros.
Guardiola, pese a tener la Bundesliga ya definida a su favor, no recurrió a una rotación extrema, consciente seguramente del prestigio que siempre está en juego en los partidos contra el Dortmund.
Con respecto al partido contra el Manchester United, Guardiola prescindió de Jerome Boateng, Toni Kroos y Thomas Müller para darle paso a Javi Martínez y Bastian Schweinsteiger, que no estuvieron por sanción en la Liga de Campeones.
Rafinha, por su parte, ocupó la posición de lateral derecho para que Philipp Lahm pasara al centro del campo. Del lado del Dortmund, Jürgen Klopp pareció ensayar lo que puede ser el equipo de la próxima temporada, al dejar a Robert Lewandowski en el banquillo y poner a Pierre Emerick Aubameyang como único hombre en punta.
El planteamiento del Dortmund fue presionar la salida del Bayern, lo que causó problemas desde el principio al equipo de Guardiola que, pese a tener claramente mayor posesión de pelota, tuvo dificultades para desarrollar su juego de combinación.
Lesión de Neuer
El Dortmund se fue en ventaja en la primera llegada a puerta del partido, que se inició con un saque de costado de Jonas Hoffmann desde la banda derecha. El saque de Hoffmann llegó al área, Aubameyang la tocó de primera a Marco Reus quien habilitó al mejor colocado Henrikh Mhkitiryan que derrotó a Manuel Neuer con un remate al segundo poste.
La primera llegada a puerta del Bayern no se produjo hasta el minuto 43, con una volea de Mario Mandzukic que Roman Weidenfeller controló sin problemas. Neuer se retiró con problemas musculares añl descanso y als cosas se terminaron de torcer para los de Guardiola.
El segundo gol del Dortmund llegó al comienzo del segundo tiempo, en el minuto 49, en un contragolpe conducido por Mhkitaryan y culminado con Reus que derrotó al meta Lukas Raeder, que había sustituído a Neuer que se había quedado en el vestuario por un endurecimiento en los gemelos.
Otro contragolpe trajo el tercero, por intermedio de Hoffmann en el 54, en una jugada en la que el reclamó una posible falta de Reus contra Javi Martínez. El Bayern apretó sobre el final, pero tuvo dificultades para llegar y sólo tuvo dos ocasiones claras de gol, en el 71 en los pies de Mario Mandzukic y en el 90 en los de Mario Götze. Al final, el Bayern se quedó con diez hombres por expulsión de Rafinha que le clavó las uñas en la cara a Mhkitaryan.