El alemán Sebastian Vettel, triple campeón del mundo y vencedor del Gran Premio de Malasia de Fórmula Uno, ha asegurado que no está "muy orgulloso" del triunfo logrado este domingo y que debe "una disculpa a Webber y a todo el equipo".
"Pido perdón a Mark. Él estaba intentando conservar el coche y los neumáticos y yo tomé la decisión de adelantarlo cuando lo estaba haciendo. No debería haberlo hecho", dijo Vettel poco después de concluir el gran premio. "No me importa la crítica, pero debo una explicación a Mark y a todo el equipo. Es un triunfo del que no estoy muy orgulloso. Hoy debería ser Mark el que estuviera en lo alto del podio", apuntó el piloto alemán.
Vettel se hizo con la victoria en Sepang, la vigésimo séptima de su carrera, por delante de su compañero de equipo después de una ardua batalla entre los dos pilotos de la escudería austríaca, que estuvieron a punto de colisionar en más de una ocasión.
"Fue una carrera dura y una gran batalla. No estaba muy seguro de cuál era la estrategia del equipo, pero funcionó al final. Es importante sumar puntos en estos inicios de temporada, aunque todavía es pronto para pensar en el campeonato", explicó el ganador hoy.
Sin embargo, durante la carrera no pensó nada de eso el alemán, quien primero pidió al equipo "que se lo quitaran [a Webber] de en medio" porque iba muy lento, a lo que le hicieron caso omiso. Después, cuando lanzó su ataque, desde el equipo le comentaron que eso "había sido una tontería", y Vettel respondió "¿habéis visto? Es un estúpido".
Webber: "Como siempre, Vettel estará protegido"
Por su parte, Mark Webber aseguró al término de la carrera que su compañero de escudería, el alemán Sebastian Vettel, "no hizo caso a las órdenes de equipo. Después de la última parada en boxes, el equipo me dijo que la carrera había terminado y que arriesgáramos lo menos posible de cara al final", explicó enfadado el australiano.
"Yo también quiero correr -añadió-, pero Red Bull tomó una decisión que solemos acordar antes de cada carrera, que suele ser la de cuidar los neumáticos y proteger los bólidos". "Hoy Seb tomó sus propias decisiones y no hizo caso a las órdenes del equipo, pero, como siempre, estará protegido. Siempre sucede lo mismo", apuntó el australiano, de 36 años.
"En el tramo final de la carrera forcé menos el motor y cuidé más los neumáticos, pero ahí empezó la pelea. Estoy decepcionado con el resultado de hoy", concluyó un visiblemente decepcionado Webber.
El equipo, incómodo
El director de Red Bull, Christian Horner, cree que la pelea "fue una situación incómoda para la escudería" y recordó a Vettel "que en la Fórmula Uno hay dos campeonatos: el de pilotos y el de constructores". "Fue una situación incómoda para nosotros. Les dimos instrucciones claras de aguantar, pero Sebastian tomó la decisión de irse a por la victoria; él quería ganar", indicó Horner.
"Ambos son muy buenos pilotos y han peleado fuerte entre ellos en varias ocasiones. Es complicado de ver porque al final puedes perder 43 puntos. No olvidemos que en la Fórmula Uno hay dos campeonatos: el de pilotos y el de constructores", concluyó el director de la escudería austríaca.