El equipo visitante acabó el partido con diez jugadores por la expulsión con tarjeta roja directa del portugués Manuel Fernándes en el minuto 86, que agredió al vasco Aritz Aduriz, una acción determinante, como lo fue el autogol del propio futbolista luso, que se tradujo en el tercer gol mallorquinista. El Valencia, que estuvo muy cerca del empate, con David Villa en el banquillo -David Silva entró avanzada la segunda parte- sigue sin ganar lejos de su campo en la segunda vuelta, aunque mantiene la tercera plaza.
El Mallorca, fiel a su objetivo de mantener intactas sus opciones europeas, sin importar al rival que tiene enfrente, salió con ganas y logró poner en apuros a su rival, un Valencia también empeñado en asegurar cuanto antes la tercera plaza. El fútbol del equipo que dirige Gregorio Manzano, no tiene secretos, y menos a estas alturas de la temporada. Borja Valero es el 'cerebro', el uruguayo 'Chori' Castro es la sorpresa en la llegada, y el vasco Aritz Aduriz, el 'matador' en el aérea.
Eso a grandes rasgos. Pero, también cuenta con una defensa sólida comandada por el portugués Nunes, al que acompañó hoy Rubén González por la lesión de Iván Ramis. Todo ello quedó en evidencia en una primera parte buenísima de los "rojillos", que ya ganaban 2-0 en el minuto 21 y que pudieron ampliar el marcador (min. 25) con un espectacular remate de Fernando Varela al travesaño. El Valencia ya venía avisado de que el peligro del Mallorca es su campo, el Ono Estadi, donde los "rojillos" han sumado 36 de los 48 puntos que acumula en su casillero, con sólo dos derrotas, ante el Sevilla (1-3) y el Barcelona (0-1).
Pero, afectados, quizás, por la dolorosa eliminación de la Europa League ante el Atlético de Madrid y el esfuerzo físico desarrollado el pasado jueves, al equipo de Unai Emery se le vio muy apagado durante muchas fases del partido.
Sin Villa y Silva en sus filas, al menos desde el inicio, toda una sorpresa al tratarse de dos jugadores desequilibrantes, capaces de encontrar espacios inverosímiles por donde hacer daño a las defensas, el ataque del Valencia pasó desapercibido, con excepción de un disparo de Juan Mata (min. 35). Además, la lesión del defensa holandés Hedwiges Maduro (min. 23) trastocó aún más los planes visitantes y Emery tuvo que recurrir a David Albelda.
Ni los argentinos Ever Banega, Alejandro Domínguez, ni tampoco el serbio Nikola Zigic, pudieron con el entramado organizado por los locales en la primera parte. Unai Emery quiso rotar a sus jugadores y dar descanso a Villa, Silva, Baraja y Joaquín, pero el 2-0 le obligó a recomponer la alineación en la segunda mitad. El Valencia descontó por intermedio de Jordi Alba (min. 46), pero pocos segundos antes, el camerunés Pierre Webó pudo marcar el tercero del Mallorca, pero lo evitó César en una gran intervención, al igual que en otras dos grandes ocasiones del propio Webó.
El partido entró en una dinámica electrizante con oportunidades para los dos equipos. El portugués Manuel Fernándes marcó en propia puerta (min. 61) y fue expulsado en los minutos finales por agredir a Aduriz. El gol de Pablo Hernández cuando el partido agonizaba, dio alas al Valencia, que tuvo opciones para empatar, especialmente, un remate de Zigic que detuvo Aouate, pero al final, el Mallorca defendió su ventaja que le permite mantener intactas sus opciones de optar a la cuarta plaza.
Ficha técnica del partido
Mallorca, 3: Aouate; Mattioni, Rubén, Nunes, Ayoze; Varela (Josemi, min. 86), Borja Valero, Martí, Castro; Webó (Mario Suárez, min. 78) y Aduriz (Víctor Casadesús, min. 91)
Valencia, 2: César; Alexis, Maduro (Albelda, min. 23), David Navarro, Alba; Hernández, Banega (Silva, min. 75), Fernándes, Mata; Domínguez (Vicente, min. 57) y Zigic
Goles: 1-0, min. 6: Castro; 2-0, min. 21: Webó; 2-1, min. 46: Alba; 3-1, min. 61: Fernándes; 3-2, min. 85: Pablo Hernández
Arbitro: Rubinos Pérez (comité madrileño). Expulsó con tarjeta roja directa a Manuel Fernándes por agresión a Aritz Aduritz en el minuto 86. Amonestó a Maduro, Pablo Hernández, Varela, Alexis, Ayoze.
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo primera jornada del campeonato de Liga disputado en el Ono Estadi ante unos 14.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el accidente aéreo en Rusia.