La séptima etapa, la más larga de la ronda, ha tenido como gran protagonista al campeón del Tour de 2007, imparable en su ataque final, y que, en teoría, contó con el beneplácito de Lance Armstrong. Contador culminó la tarea de un Astana, que se confirmó como el equipo más potente, ayudado por la racanería y el conservadurismo del resto de aspirantes.
El ataque del madrileño llegó algo tarde, lo que le costó el haber podido vestirse de amarillo, mérito que, por espacio de seis segundos, fue a parar al italiano Rinaldo Nocentini (AG2R), quien sonrió junto con el vencedor de la etapa, el neoprofesional Feillu (Agritubel), de 23 años.
El francés probó fortuna y fue el más fuerte en las rampas de Andorra Arcalís, un puerto no demasiado exigente. Él y Nocentini estuvieron acompañados por los españoles Egoi Martínez (Euskaltel) y José Iván Gutiérrez (Caisse), además de Van Christophe Riblon (AG2R), Aleksandr Kuschynski (Liquigas), Christophe Kern (Cofidis), Jérôme Pineau (Quick Step), y Johannes Fröhlinger (Milram).
Los escapados contaron con la colaboración del grupo de favoritos, lo que favoreció a Feillu, que con su ataque y la falta de movimientos por detrás, pudo lograr una victoria de prestigio.
Por su parte, el Astana controló perfectamente la jornada y demostró que cuenta con un potencial muy grande. Sin forzar la 'máquina', logró descolgar al hasta hoy líder, el suizo Fabian Cancellara (Saxo Bank), y con Andreas Kloden y Levi Leipheimer acompañando a Armstrong y Contador en los kilómetros finales, controló la ascensión.
Además, el texano, al que se le vio bastante mejor que en el pasado Giro, y el español, se vieron favorecidos por la falta de ataques de sus rivales, pese a que todos ellos llevaban tiempo perdido. Sólo el australiano Cadel Evans (Silence-Lotto) lo intentó, sin suerte y en la antesala de la salida de Contador. Éste salió lanzado, y el resto quiso seguirle, pero sin éxito. Kloden y Armstrong ejercieron de buenos compañeros y no aumentaron el ritmo, y el de Pinto asestó el tercer golpe a sus rivales después de aventajarles en las cronos de Mónaco y de Montpellier.
Ahora, aventaja al siete veces ganador de la 'Grande Boucle' en dos segundos, mientras que su primer gran rival, el luxemburgués Andy Schleck (Saxo) está casi a dos minutos. El ganador de 2008, Carlos Sastre (Cervelo), que tampoco se movió, a casi tres, y Evans, a más de tres.
Este sábado se disputará la octava etapa, con salida en Andorra La Vella y final en Saint-Girons tras 176,5 kilómetros con el Puerto de Envalira, de primera categoría, nada más darse la salida, el Col de Port, de segunda, y el Agnes, de primera.