El Bayern de Múnich se ha clasificado para los cuartos de final de la Liga de Campeones después de perder en casa ante el Arsenal (0-2) y sufriendo mucho más de lo esperado tras la cómoda renta que había acumulado en la ida (1-3).
El Arsenal se puso por delante en el minuto 3 con un gol del francés Olivier Giroud tras un centro de Theo Walcott. Era el mejor comienzo que podía tener el partido para el equipo inglés, que encontraba razones para creer en el milagro.
Sin embargo, tras encajar el gol de Giroud, el Bayern tomó el control del partido y merodeó con asiduidad las cercanías de la portería de Lukas Fabianski, aunque no logró generar posibilidades claras de gol durante los primeros 45 minutos. El Arsenal, por su parte, sólo se aproximaba esporádicamente al área contraria.
El acoso del Bayern al área inglesa continuó al comienzo de la segunda parte. Toni Kroos y Arjen Robben intentaron remates de media distancia en los minutos 47 y 48. Luiz Gustavo también hizo la prueba en el 63, con un disparo desde la media luna que salió ligeramente desviado.
Con el paso de los minutos, la presión del Bayern se fue haciendo más fuerte y en el 68 Robben tuvo una gran ocasión de gol, tras un gran pase de espuela de Thomas Müller, pero Fabianski reaccionó con una gran parada. Más tarde, en el 75, el holandés estuvo otra vez cerca de marcar, pero remató desviado desde una buena posición.
El Arsenal empezó a atacar con más intensidad pasado el minuto 70. Era como si hasta ese entonces hubiera apostado por no darle demasiados espacios al Bayern y esperar a los veinte minutos finales para buscar el milagro. En el minuto 79, Gervinho tuvo una gran ocasión al rematar desviado desde unos seis metros. Y en el 86 Koscienly marcó de cabeza, aprovechando un saque de esquina, y dio inicio a una recta final del partido con un dramatismo que pocos hubieran esperado.
El Bayern terminó pidiendo tiempo, llevando el balón a la banderola del saque de esquina para esperar a que pasasen los segundos y asegurar su clasificación a los cuartos de final. El equipo bávaro lo consiguió, pero estuvo cerca del abismo.