El mayor acierto exterior, y un mejor sentido colectivo dieron al Fútbol Club Barcelona el triunfo en el duelo de Euroliga entre los catalanes y el Real Madrid. Sin embargo, la exigua victoria catalana (85-80), permite al equipo de Pablo Laso depender de sí mismo para acabar como primero de grupo la próxima semana y tener, en principio, un cruce de cuartos de final más asequible antes de la Final Four de Madrid.
El partido comenzó con los visitantes más acertados, liderados por un pletórico Rudy Fernández que, en perfecta sociedad con Gustavo Ayón, martirizaba una y otra vez el aro local, de forma que los de Laso lograron una rápida ventaja que estabilizaron en los ocho puntos de diferencia con que concluyó el primer cuarto. Enfrente, el Barcelona no mostraba la lucidez ofensiva que sería decisiva en la recta final del encuentro, y sólo su gran superioridad en el rebote permitía a los de Xavi Pascual, con el problema añadido de las dos rápidas faltas de Ante Tomic, mantenerse relativamente cerca de su rival.
Sin embargo, la ventaja blanca seguiría estable en el comienzo del segundo parcial, ahora con Sergio Rodríguez ejerciendo como líder del ataque visitante. No fue hasta la aparición de un desatado Mario Hezonja, agresivo en defensa desde el primer instante, y un auténtico caníbal en ataque, cuando los locales se engancharon definitivamente en sensaciones y marcador al partido. La irrupción del joven alero de Dubrovnik, denostado por Xavi Pascual en las últimas semanas, se produjo a apenas cuatro minutos del descanso y, a partir de ahí, la dinámica del encuentro volteó de forma palpable.
El propio croata siguió liderando a los suyos tras el paso por vestuarios, ahora sí como titular tras convencer, como no podía ser de otra forma, a su entrenador. Entre él y Oleson el perímetro azulgrana comenzó a ejecutar a la perfección el gran movimiento de balón del Barça, ante un Madrid que comenzaba por momentos a hacer la guerra de forma más individualista. Los blancos hacían la goma, recortando hasta dos veces desventajas de ocho puntos, pero tampoco parecían forzar la maquinaría en exceso, con Ayón viendo desde la barrera la recta final, al igual que un Sergio Rodríguez que volvió a cancha con apenas un minuto por jugar, y los locales cinco arriba.
Ante un Barça más necesitado de ganar, dio la sensación de que los de la capital no quisieron entrar en excesivas batallas y se conformaron con salvar el average que les permitirá ser primeros ganando la próxima semana como locales al Zalgiris Kaunas. Un postrero triple de Oleson fue la puntilla definitiva al duelo tras un parcial de 7-0 del Barça tras el 78-78. El Madrid ni defendió la última acción, habida cuenta de que consideraba una victoria parcial la diferencia de puntos. Eso sí, los blancos deberán refrendarlo la próxima semana, ante el mismo rival que el año pasado les ganó en la última jornada. Aunque aquella vez, cabe recordarlo, el partido fue en Kaunas, y el castigo por las derrota parecía menor al que supondría esta temporada.
Ficha técnica:
Fútbol Club Barcelona: 85, (17+24+23+21): Satoransky (5), Navarro (6), Thomas (7), Nachbar (6), y Tomic (8) - cinco inicial – Huertas (0), Hezonja (15), Abrines (5), Oleson (12), Pleiss (9), y Lampe (12).
Real Madrid: 80, (25+16+21+18): Llull (8), Rudy Fernández (20), Carroll (4), Reyes (8), y Ayón (10) –cinco inicial- Nocioni (8), Rivers (0), Slaughter (4), Maciulis (1), Bourousis (0) y Rodríguez (17).
Árbitros: Ryzhyk (Ucrania), Lottermoser (Alemania) y Latisevs (Letonia). Sin eliminados.
Incidencias: partido disputado en el Palau Blaugrana de Barcelona. Antes del mismo, se guardó un minuto de silencio por la muerte del ex jugador internacional español, Lalo García.