El Atlético de Madrid vuelve a alcanzar la gloria europea al derrotar (3-0) al Athletic de Bilbao en la final española de Bucarest. Dos años después de su triunfo ante el Fulham en Hamburgo (2-1), el equipo colchonero conquista su segundo título de la Liga Europa.
Los leones, en cambio, se quedan otra vez con la miel en los labios en su segunda final continental. En 1977 perdieron ante la Juventus de Gentile, Zoff, Tardelli y Bettega, entre otros, y ahora, 35 años después, se han visto superados por el rocoso conjunto de Diego Simeone. Un soplo de aire fresco el Cholo, que ha dado bríos renovados a un equipo sin rumbo hasta hace unos meses.
El Athletic salió un tanto encogido al césped del Estadio Nacional de la capital rumana, una de las joyas arquitectónicas de Europa del Este, y enseguida lo pagó caro. Sólo seis minutos necesitó el Atlético para ponerse por delante en el marcador. Y lo hizo en una gran jugada individual del hombre de la noche, Radamel Falcao. El colombiano se plantó en el pico del área ante Amorebieta, al que recortó sin problemas, para inventarse un zurdazo increíble y acabar colando el balón por toda la escuadra, haciendo inútil la estirada de Iraizoz.
Todo un mazazo para los leones, que trataron de reaccionar aunque se topaban una y otra vez con una defensa muy seria. Pasado el cuarto de hora llegó su primera ocasión clara, con un remate forzado de Llorente, tras centro de Iraola, que salió desviado. El riojano, llamado a protagonizar un bonito duelo de goleadores con Falcao, estuvo siempre bien tapado por Godín y Miranda, que hicieron un gran trabajo.
De nuevo lo intentaría el equipo vasco con un tiro lejano de ese pequeño diablo llamado Iker Muniain ante el que se lució Thibaut Courtois con una buena mano. El Athletic buscaba el gol pero lo que acabaría llegando fue el 2-0 que acercaba aún más la Copa a las vitrinas del Vicente Calderón. Superada la media hora de juego, Arda Turan aprovechó un error de Amorebieta en defensa para poner un balón al corazón del área. Allí apareció Falcao, el de siempre, para recortar con total maestría ante Aurtenetxe y batir a Iraizoz por donde no se lo esperaba. Era el duodécimo gol en el torneo del colombiano, que ya ganó la Liga Europa con el Oporto la pasada campaña.
Fue una bofetada en toda regla para el Athletic, que se quedó sin capacidad de reacción de ahí al descanso. Lo intentó De Marcos, uno de los más notables de los suyos, con un disparo lejano que apenas llegó a inquietar a Courtois. Así moría la primera mitad mientras Neptuno se engalanaba viendo que la fiesta estaba al caer.
El Athletic se estrella contra un muro
Marcelo Bielsa, que hace una década dirigió al Cholo en la selección argentina que fracasó en el Mundial de Corea y Japón, no lo veía nada claro y realizó dos cambios en el intermedio, dando entrada a Ibai Gómez e Íñigo Pérez en lugar de Aurtenetxe e Iturraspe. Salió enchufado el equipo bilbaíno en la segunda mitad, en busca del gol que volviera a meterle en la final. Muniain protagonizó una buena internada por la derecha, aunque se topó con la certera intervención de Miranda.
El partido entró entonces en una fase de absoluto dominio del Athletic, que tenía la posesión de la pelota. Pero resultó infructuoso. Intentó adelantar líneas el conjunto vasco, aunque se estrellaba continuamente con la bien plantada zaga madrileña, donde, además de los centrales, también rayaron a buen nivel los laterales Juanfran y Filipe Luis. Especialmente el brasileño, que tenía ante sí la difícil misión de frenar a un jugador desequilibrante como Markel Susaeta.
Con Llorente desaparecido en combate y Muniain pasado de frenada, tratando de encontrar por el centro los huecos que no existían, fue precisamente el jugador de Éibar el que se echó el equipo a la espalda. También lo intentaron De Marcos, que se dio una auténtica paliza, y el talentoso Ibai, que probó fortuna con una volea que salió ligeramente desviada. Pero las ocasiones más claras de los leones, que jugaron como visitantes y por eso vistieron de verde, corrieron a cargo de Susaeta. En una de ellas lo tuvo todo de cara para haber batido a Courtois: chutó a puerta con calidad, pero demasiado flojo.
Mientras, el Atlético se sentía cómodo cediendo la pelota a su rival y esperando su oportunidad al contragolpe. En una de esas jugadas, Arda Turan quiso lucirse con una vaselina imposible que atrapó Gorka. Faltaba el último zarpazo del Tigre Falcao, que rozó el triplete al estrellar un balón en el palo. Era un partido de ida y vuelta, que acabó con el gol de Diego. El brasileño, que no tiene clara su continuidad en el equipo rojiblanco la próxima temporada, recibió arriba un balón, quebró la cintura de Amorebieta -partido horrible del internacional venezolano- y superó a Iraizoz con un exquisito tiro cruzado.
Un golazo que suponía la sentencia. El conjunto madrileño vuelve a alcanzar la gloria, reverdeciendo los viejos laureles de Hamburgo, y priva de ella al desconsolado Athletic, como así quedó demostrado con las lágrimas de Muniain en la noche bucarestina. Los vascos tendrán que esperar para sacar la gabarra. El próximo 25 de mayo, en la final de la Copa del Rey ante el Barcelona en el Vicente Calderón, tendrá una nueva oportunidad.
Ficha técnica
Atlético de Madrid, 3: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe Luis; Gabi, Mario Suárez; Adrián (Salvio, m.87), Diego (Koke, m.89), Arda Turan (Domínguez, m.92) y Falcao
Athletic Club de Bilbao, 0: Iraizoz; Iraola, Javi Martínez, Amorebieta, Aurtenetxe (Ibai Gómez, m.46); Iturraspe (Íñigo Pérez, m.46), Ander Herrera (Toquero, m.62), De Marcos; Susaeta, Muniain; y Llorente
Goles: 1-0, m.6: Falcao; 2-0, m.33: Falcao; 3-0, m.85, Diego
Árbitro: Wolfgang Stark (Alemania). Mostró tarjeta amarilla a Ander Herrera (m.21), Amorebieta (m.63), Íñigo Pérez (m.74) y Susaeta (m.90), del Athletic Club; y a Falcao (m.25), del Atlético
Incidencias: Final de la Liga Europa 2011/12 disputada ante 52.347 espectadores, entre ellos unos 10.000 seguidores de cada equipo, que prácticamente llenaron el Estadio Nacional de Bucarest. Noche agradable y terreno de juego en buenas condiciones. En el palco de autoridades se encontraban el Príncipe de Asturias; el lehendakari Patxi López; la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; y el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, entre otras personalidades