Pau Gasol se ha reivindicado como el mejor de los Lakers en el duelo clásico de la NBA ante los Celtics de Boston y, además de conseguir un doble-doble de 25 puntos y 14 asistencias, protagonizó la jugada decisiva cuando en el último segundo de la prórroga puso un tapón al intento de canasta del escolta Ray Allen y aseguró la victoria.
El protagonismo de Pau se unió al de su hermano Marc, que horas antes había sido elegido para jugar el Partido de las Estrellas como uno de los siete reservas de la Conferencia Oeste, el próximo 26 de febrero en Orlando.
Decisivo Pau
El mayor de los Gasol, que por el contrario no estará esta temporada en el Partido de las Estrellas, fue el principal artífice en el TD Garden de Boston de la victoria de los Lakers en la prórroga por 87-88 sobre los Celtics, que llevaban cinco triunfos consecutivos.
En la última jugada, el alero Paul Pierce intentó una canasta, pero el balón salió rebotado y cuando Allen capturó el rebote y buscó anotar lo que hubiesen sido los dos puntos del triunfo surgió la mano milagrosa de Gasol, que reivindicó que podría haber sido elegido perfectamente para su cuarto Partido de las Estrellas.
Gasol, que consiguió el decimoquinto doble-doble en lo que va de temporada, el cuarto en el mes de febrero, jugó 41 minutos y anotó 12 de 20 tiros de campo, falló un intento de triple y estuvo perfecto, 1-1, desde la línea de personal, además de repartir tres asistencias y poner el tapón decisivo.
El jugador de Sant Boi al concluir el partido fue abrazado por todos sus compañeros y por el entrenador de los Lakers, Mike Brown, que entendió que la aportación de Gasol había establecido la diferencia en el marcador final. "Me ha pasado otras veces, te quedas parado mirando a ver dónde va el balón, y pierdes el partido", ha comentado Gasol tras la victoria conseguida. "La experiencia también te sirve para corregir errores", informa EFE.
Ibaka, un muro
Si Gasol salvó el partido con el único tapón que puso, el ala-pívot congoleño, nacionalizado español, Serge Ibaka volvió a llegar a los 10 tapones por segunda vez en menos de ocho días y empató su propia marca, que es la mejor de la temporada en la NBA.
Sin embargo, la gran labor defensiva de Ibaka no impidió que los Thunder de Oklahoma City cayesen derrotados 106-101 ante los Kings de Sacramento, que se aprovecharon de las 23 perdidas de balón que tuvo el equipo rival durante el partido.
El ala-pívot español logró sus primeros 10 tapones el pasado 2 de febrero durante el partido que los Thunder ganaron por 95-86 a los Mavericks de Dallas. Ante los Kings, Ibaka jugó 30 minutos en los que capturó nueve rebotes y anotó seis puntos: 2 de 5 tiros de campo y 2 de 2 desde la línea de personal.
Ibaka se quedó a solo un tapón de haber empatado la mejor marca que se ha registrado en el Power Balance Pavilion, de Sacramento, que antes tenía el nombre de Arco Arena, establecida por el legendario expívot David Robinson, de los Spurs de San Antonio.
Los Thunder también establecieron una marca de franquicia al llegar a los 17 tapones. "Es frustrante perder el partido, pero sobre todo por un compañero como Serge (Ibaka) que realizó una labor espectacular bajo los aros", declaró el alero estrella de los Thunder, Kevin Durant. "Estuvo imparable bajo los aros y en la pintura, y es una derrota muy dura de asimilar".