El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, ha comentado después de que su equipo ganara el Mundial de Clubes que lograr 13 de los 16 títulos que el club ha disputado con él como entrenador "habla por sí solo". "La continuidad, estar arriba. Eso es lo difícil", explicó Guardiola en la rueda de prensa posterior a la final del torneo, en la que su equipo arrolló al Santos (0-4), con respecto a los excelentes registros del club desde su llegada al banquillo.
"Esto se recordará siempre, aunque no sé si ellos son conscientes ahora mismo", comentó un Guardiola que se mostró muy satisfecho con el partido realizado por sus jugadores, los cuales, opinó el técnico, jugaron al nivel de la final de la Liga de Campeones que el Barça disputó este año con el Manchester United.
El entrenador azulgrana se mostró especialmente contento con la primera parte por el juego del equipo y porque éste logró mantener atado a Neymar. "Vimos cinco o seis partidos del Santos y sabíamos que había que prepararse cuando Neymar coge el balón", explicó.
El preparador le quitó importancia a su planteamiento al ser preguntado por su dibujo táctico, que algunos definieron como un "3-7-0", y aseguró que la fórmula es en realidad simple. Guardiola dijo que en realidad lo que intentan hacer es pasarse el balón "lo más rápido posible. De hecho, lo que Brasil ha hecho toda su vida, según me contaban mis padres y abuelos". "Intentamos que se junten en torno al balón", resumió.
Preguntado sobre si este Barça es el mejor de la historia, Guardiola también quiso ser modesto. El técnico opinó que "para llegar a este nivel de juego tienen que existir generaciones anteriores", y aseguró que los jugadores que tiene a su cargo "vieron jugar a los que jugaron antes en el club, que también jugaban muy bien".
El entrenador culé calificó el trofeo logrado como "un premio difícil de conseguir" y recalcó su felicidad por conseguir este título en Japón, donde el Barça cayó en la final de este torneo en 2006 contra el Internacional de Porto Alegre y donde también, con Guardiola como jugador, perdió la Copa Intercontinental contra el Sao Paulo en 1992.
El técnico opinó que Messi, que marcó dos goles y al que denominó "un jugador distinto, especial", hizo un gran partido, aunque quiso reconocer la gran actuación de todo el bloque.
"Andrés (Iniesta) ha hecho un partido enorme. Thiago también", valoró el catalán, que también repartió elogios para Xavi, Puyol, Valdés o Sergio Busquets, del que dijo que "como siempre, ha vuelto a demostrar por qué es el mejor mediocentro del mundo"
Guardiola aseguró que el equipo dedica este triunfo a jugadores lesionados del club, como Afellay y David Villa, que se fracturó la tibia en este campeonato el pasado jueves, y también a su ayudante Tito Vilanova, operado recientemente de la glándula parótida, al que dijo que "personalmente" echa un poco más de menos.