Oír hablar de fútbol en la iglesia de San Juan de los Caballeros, de Segovia, no es habitual, pero el "Hay Festival" ha propiciado la ocasión de contar con Del Bosque en uno de los debates de este gran encuentro cultural, por el que desfilan decenas de escritores cada año pero hasta ahora nunca había contado con un entrenador de fútbol.
Acompañado por Juan Ignacio Gallardo, subdirector del diario deportivo Marca, y por David Bach, decano de programas de IE Business School, Vicente del Bosque ha dado una lección teórica sobre las cualidades que debe reunir un buen entrenador y ha esquivado con habilidad las preguntas que le hizo el público sobre el portugués José Mourinho o por la ausencia de Raúl en la selección nacional.
Tras dejar claro que todo lo que iba a decir en tan singular escenario eran "opiniones, no dogmas", Del Bosque ha afirmado que un entrenador debe ser una persona "recta, íntegra, preparada para su trabajo y debe también saber ganarse la confianza de los jugadores". "El entrenador debe ser un líder moral y tener vocación", ha asegurado el seleccionador nacional al trazar el perfil idílico de su trabajo.
Hace unos años, prosiguió, los entrenadores "se imponían, pero ahora hay que convencer. Sin esa capacidad es difícil manejar un equipo". La labor del entrenador es importante porque "marca el estilo de liderazgo con su carácter, formación y experiencia". "El líder debe tener honestidad y sentido común. Hay que liderar con el ejemplo".
Del Bosque ha asegurado que no entiende a "un líder enfadado ni cabreado". El fútbol es un juego y hay que disfrutarlo. Las buenas relaciones en un vestuario son fundamentales. Sin ellas "es difícil el éxito en el fútbol", un deporte que está lleno de "singularidades", entre otras razones por las diferentes procedencias de los miembros del equipo y porque "unos ganan mucho y otros, menos. Y algunos ganan mucho más que quienes lo dirigen", y eso no se da en otros tipo de empresas, señalaba Del Bosque con humor.
En el fútbol, y en cualquier tarea de la vida, la palabra clave "es emoción". "La ilusión y la emoción por hacer las cosas son fundamentales", ha dicho el entrenador antes de referirse a los "líos" que producen a veces en la selección nacional el eterno enfrentamiento entre los dos grandes equipos españoles, el Real Madrid y el Barça.
Esos "líos" de los que habla Del Bosque han generado "inquietud en la selección", y por eso les ha dicho a los jugadores que "hay que defender nuestro deporte, independientemente del equipo al que pertenezcan. Y tenemos que defender de la mejor forma posible a nuestro país".