En su columna habitual de los lunes en El Periódico de Catalunya, Johan Cruyff asegura que el Barcelona puede sentirse orgulloso porque son los demás los que reconocen su triunfo en la final de la Champions en Wembley contra el Manchester United. "Ganar en sí ya es motivo de alegría, pero hacerlo del modo en que lo hizo es motivo de orgullo. Y más si lo reconocen los que no son de los tuyos. Ojeando la prensa inglesa, no encontré ni una excusa por la derrota del United. Perdió el Manchester, ganó el Barça, pero se impuso el fútbol", añade el holandés.
También se ha referido Cruyff a sus polémicas declaraciones en el diario italiano La Gazzetta dello Sport, en las que aseguraba que no le sorprendería que Pep Guardiola se marchara del Barcelona después de la final. "Uniendo como une siempre su futuro más inmediato a la respuesta y actitud de su grupo, los barcelonistas pueden estar tranquilos", asegura. "La decisión es sólo suya, cuando se vaya habrá que buscar a otro y esta será una decisión fundamental", añade.
"E incluso con Guardiola al frente será fundamental el apoyo incondicional no de su gente, no de sus jugadores, no de sus colaboradores, sino de los rectores del club", afirma el holandés en un claro mensaje a la Junta Directiva que preside Sandro Rosell. "Un ciclo ganador no se acaba casi nunca por culpa del vestuario –jugadores o entrenador–, sino por causas de fuera del mismo. Este vestuario tiene elementos de sobra para seguir peleando por todo, pero si aparece gente ajena a él con ganas de intervenir donde no debe surgirán los problemas", añade.
Así, Cruyff señala que, tras el triunfo logrado por el Barcelona en Wembley en 1992, fue fundamental "confiar y dotar de total libertad a (Frank) Rijkaard y Guardiola. Vistos sus éxitos y su forma de conseguirlos es justo acordarme del presidente que apostó por ellos en su día. El mismo presidente que la junta actual ha puesto en entredicho de formas diversas. Por actitudes y acciones como estas es por lo que temo", sentencia.
Además, también tiene palabras para el Real Madrid. Al técnico no le preocupa "que el Madrid pueda reforzarse o que se deje una pasta en ello. Por más que fiche, sólo jugarán once. Si el Barça sigue como ahora, no habrá ningún problema". Lo que sí le preocupa es "que alguno de arriba se crea más listo y más sabio que los de abajo".