La italiana Gucci y la americana Guess continúan en los tribunales. La batalla por hacerse con la G y no compartirla les está saliendo muy cara. Y es que la doble de G de la marca italiana es mucho más antigua, potente y verdadera, que la de la compañía americana. Ahora Gucci apela la sentencia que asegura que Guess no ha atentado contra las patentes de Gucci en Italia o EE. UU. Pero no cabe duda de que, si de algo carecen los americanos es de una estética. Siempre han adorado la elegancia francesa y el ‘saber hacer’ italiano. No obstante, sabemos de sobra que los americanos fueron los creadores del marketing y del minimalismo. Podemos hablar también de otro genio de las falsificaciones de lujo, Michael Kors, quien, según Roberto Cavalli, es el mayor plagiador de la historia de la moda. Pero aquél hace caja, más que Cavalli y sus fantásticos vestidos. Los bolsos de Kors son una fiel imitación de algunos de Louis Vuitton. Y además más accesibles que los de Vuitton. Como lo es Guess con Gucci. Mientras un bolso Gucci ronda los 1000 euros, un Guess se puede conseguir por 150. Es la realidad de cómo se puede democratizar una marca de lujo.
En la compañía americana Guess se ve la decisión del tribunal como una "victoria hacia la autenticidad de la firma", y asegura que no hay competencia desleal alguna. La primera disputa entre ambas firmas, en mayo de 2013, parecía calmarse con la indemnización, que ascendía a los 3,6 millones de euros, por parte de Guess a Gucci por daños y perjuicios. Se supone que Guess fabricaba y vendía productos de la firma con un logotipo muy similar a la doble G de Gucci.
La gran diferencia entre una marca y otra es que mientras la firma estadounidense utiliza plástico barato, Gucci emplea materiales nobles, siendo la mayoría de sus bolsos y complementos artesanales. Pero lo cierto es que Guess en España gusta mucho. Razón por la cual en su último ejercicio fiscal, la marca americana, que ha tomado las riendas de su distribución en el país desde 2009, ha concluido 2014 con un aumento del 6% en sus ventas. Y ante el éxito que tienen los productos entre las consumidoras españolas, a lo largo de este 2015 tienen planificado abrir 5 nuevos establecimientos. Así, Puerto Banús de Marbella, Ibiza, Tenerife y Bilbao se convierten en sus focos principales para seguir con la expansión por España.
La firma, que empezó haciendo vaqueros en los 80, ha sufrido un batacazo al concluir el primer semestre del último ejercicio con una caída del 60% en su beneficio. Los fundadores de la marca, Paul y Maurice Marciano, abandonaron el sur de Francia para vivir el ‘Sueño Americano’ fabricando vaqueros en la década de los 80. Y primero nació la marca ‘Marciano’ y más tarde ‘Guess’. Gucci, mucho antes y con más historia, nacía en los años 20 cuando Guccio Gucci, un simple botones en un lujoso hotel de Londres, quedó maravillado ante los accesorios lujosos de viaje que pudo apreciar durante su humilde trayectoria laboral, y regresó a Florencia para fundar una empresa que ofrecía productos de viaje artesanales.
Se puede entender cuán fácil es copiar la esencia de una marca y destruirla involuntariamente. No hay nada como la mediocridad y la ausencia de talento creativo, que obliga a empresarios a copiar otras marcas. No hay nada más triste que no tener tu propia esencia, y tener que recurrir a emblemas de los vecinos para ganarse, a su vez, el público de estos. Pero esto es lo que hay, y debemos agarrarnos a la ley que en ciertos casos puede proteger una marca, una filosofía, una esencia.