La hasta cierto punto inesperada salida de Gran Hermano de Mercedes Milá -inesperada para el público, no tanto para ella misma- sigue coleando. La presentadora y periodista sigue dando explicaciones sobre las razones de su marcha, su sustitución por Jorge Javier Vázquez, y también pasa revista a los años que ha estado conduciendo el popular reality.
Sorprendida por el revuelo montado, Milá agradece la fidelidad del público, al tiempo que agradece a la cadena la oportunidad brindada... aunque no sin lanzar sus previsibles pullas.
"A mis 65 años ya voy aprendiendo a callar. Antes hablaba y decía todo. Ya no, porque a base de darme golpes he aprendido a controlarme", dice al respecto, manifestando cierto descontento.
En una entrevista en Hoy por hoy de la Cadena Ser, Milá reivindica su criticada etapa al frente de este programa de entretenimiento tras muchos años de dedicación a la actualidad. "16 años a mucha honra", ha dicho, orgullosa de haber llegado a "generaciones a las que no pensaba que llegaría".
Pese a estar ya un tanto cansada del formato, Milá estaba abierta escuchar la nueva oferta para conducir GH, aunque solo fuera por "respeto y lealtad". La oferta, sin embargo, "no llegó", de modo que Milá les ofreció que "si no llegaban al dinero que pedía que hasta hacía una publicidad". No obstante, deja caer un dato importante: "En 16 años no me subieron el sueldo porque no se podía ¿te lo crees?".
A ello habría que añadir otra petición desatendida por la cadena de Vasile, tener un "programa social" que se hubiera llamado Cuéntame en qué puedo ayudar. "Yo le dije a Vasile que quería trabajar todo el año, no solo los tres meses de GH. Y como no me dieron el programa informativo al que se comprometieron me marché a Antena 3, pero luego volví a Telecinco", explicó.
También habla de su propia experiencia vital, al fin y al cabo lo más importante a la hora de haber dejado las riendas del programa. "Yo he pasado dos últimos años complicados con estrés y con líos", explicó, citando también a su madre, "muy contenta de que no lo presente". Dijo Milá que su progenitora está muy contenta de que ya no tenga que ponerse "escotes y faldas" en antena.
La manera en que se difundió su marcha de Gran Hermano, mediante un comunicado emitido por la propia Telecinco, fue la puntilla. Esto ocurrió antes de que ella pudiera dar su versión de los hechos, y no le gustó "porque acentuaban una diferencia económica" que, según ella, tampoco fue lo fundamental. "Yo digo que lo cambien, no me hacen caso y no vuelvo a saber nada más hasta ayer que como con Vasile, pero no hablamos nada de Gran Hermano. Y pensé que si él no me sacaba el tema yo tampoco lo haría".
No obstante, Milá se marcha feliz y mira directamente a la preparación de nuevos proyectos. Anticipa su próximo programa, Convénceme, también en Mediaset: un programa de libros en el que cada lector acudirá a la librería de Milá en Barcelona, y en la que los protagonistas anónimos criticarán los libros elegidos para animar -o no- a la presentadora a hacerse con el volumen.