La protagonista de esta semana en Hermano Mayor fue una joven de 20 años, que se llama Ada, con serios problemas de agresividad y una gran dependencia emocional de su madre. Por primera vez desde que empezó el programa han tenido que interrumpir la grabación porque la chica, en un ataque incontrolado de agresividad, le dio una patada a una puerta de cristal rompiéndose así el talón de Aquiles. Tuvo que ser operada de urgencia y permanecerá de baja tres meses.
Ada está obsesionada con su madre, de tal manera que solo la quiere para ella y por eso no piensa irse de casa. Los problemas de la conflictiva chica son tales que reconoce que uno de los días más felices de su vida fue cuando sus padres le dijeron que se iban a divorciar, porque así tendría a su madre, Adela, para ella sola.
Los problemas de la joven aumentaron cuando su madre empezó a salir con una persona y acaban viviendo juntos. En ese momento la convivencia ya era insoportable e insostenible pero, como Adela siempre ha sobreprotegido a su hija y le ha permitido que ella haga lo que quiera, no es hasta que se niega a ponerle el desayuno por la mañana, recogerle la ropa, hacerle la comida... cuando decide tomar una decisión. Esto hace que la ira de Ada sea incontrolable y acabe insultando, amenazando y rompiendo todo lo que tiene a su alrededor.