Sonsoles Onega es una de las periodistas que, a pesar del coronavirus, no ha dejado de trabajar al frente del programa Ya es mediodía, que a diario presenta en Telecinco. "Para mí el confinamiento no ha sido tan duro porque salgo todos días. Ahora hay que pensar que por lo que estamos viviendo, lo de antes no existe, ya se me ha olvidado. El 13 de abril se iba haber presentado mi ultima novela y de momento se ha aplazado hasta el 2 de Junio, ahora tengo que volver a leerla para procesar todo. Hay resetear muchas cosas, como las agendas llenas de compromisos, y pienso que va a ser más duro salir que quedarse en casa, no se va a poder celebrar nada, modular las emociones y no poder es terrible, aunque estoy convencida que con el tiempo todo volverá, al menos es lo que pienso. En la actualidad, hay una gran sensación de falta de futuro. Esta pandemia nos recuerda lo frágiles que somos, y ese largo plazo se queda interrumpido y no se puede planificar nada." Así lo definió.
La periodista está encantada con su ultimo trabajo literario, que lleva por titulo Mil Besos Prohibidos. "Ahora nos los han prohibido, es una novela contemporánea, de un amor interrumpido adolescente entre una mujer que se llama Costanza, y un sacerdote, el padre Mauro. Un amor imposible que se reencuentra después de muchos años. Él siguió con la Iglesia, y ella con su vida. Una novela muy apasionada y volcada en esa necesidad de amor de verdad. Y cierto es que da bastante miedo volver a los lectores".
Al preguntarle su opinión sobre como está gestionando el gobierno todo lo referente al Covid 19, su opinión fue muy clara. "Lo veo desnortado y desconcertado. Hay una gran crisis sanitaria y económica. La legislatura les salta por los aires, un momento delicado con una falta de grandes consensos, desde Europa al Banco de España y demás. Hay que evitar la crispación que hay en estos momentos, y eso depende de la clase política que tenemos. Todo el que tiene un altavoz, tiene una responsabilidad, las colas del hambre es un gran problema. Hay una falta de información y de comunicación y se me llevan los demonios, porque se han cometido errores muy graves. La pandemia es el striptease del mundo entero".
Sonsoles, durante la conversación que mantuvimos, también me comentó que su familia está bien. "Tenemos mucha suerte, porque tengo una abuela con 94 años. La vemos en el rellano de la escalera. El drama de los mayores mejor ni tocarlo"
Para la periodista el caso Merlos ha sido un respiro en todo lo que está ocurriendo. "Es un alivio en la escaleta del programa, y para los ciudadanos una válvula de escape. Han visto que existe el amor y la pasión. Esa historia nació en mi plató, la verdad es que me ha dado pena, estoy del lado de Marta porque no me gustan las infidelidades. Alfonso se ha confundido, pero quiero dejar claro que le tengo un gran aprecio y que no viene al programa por su propia decisión. Cierto es que Marta ha sufrido mucho.
A Sonsoles el caso Avilés no le interesa demasiado." Es un personaje con el que no me he familiarizado. Me parece terrible, una vida llena de mentiras".