Kiko Rivera hizo pública la semana pasada su intención de perder peso. El hijo de Isabel Pantoja desveló haberse sometido a una intervención de reducción de estómago y los efectos en su físico empiezan ya a notarse. De hecho, él mismo está documentando mediante vídeos su adiós a los kilos de más, algo que -como es habitual en las publicaciones en redes sociales del DJ- es objeto de mofa por parte de muchos internautas.
Pero esta vez el asunto está yendo algo más allá. Varios medios se han hecho eco ya de las graves y desagradables amenazas que Kiko Rivera estaría recibiendo no solo por su iniciativa de perder peso sino por sus otras actividades profesionales en el mundo de la música (por no mencionar su mediática vida familiar).
El origen del conflicto -desveló Pepe del Real en El Programa del Verano- podría ser el supuesto veto en redes sociales de Kiko a un cantante conocido como James, y dio comienzo con un vídeo que mostraba a Kiko pinchando en uno de sus bolos.
El DJ impidió la actuación, por razones desconocidas, del citado cantante James en un festival de música latina donde pinchó recientemente, y poco después comenzaron a sucederse las amenazas desde diferentes perfiles anónimos.
"Vete preparando que te voy a peinar la calva con un cuchillo"; "no vas a reunir a tanta gente hasta el día de tu funeral, cuando hagamos cola para cagar en tu tumba"; "contrata seguridad o la cosa se pondrá mal"...
Amenazas de muerte que le emplazan a "aprovechar la multitud", o incluso "preparar tu ano para el señor Stalin" son solo algunas de las feas amenazas dedicadas a Kiko desde estos perfiles. Se trata de individuos desconocidos que, según el espacio Viva la vida, podrían estar vinculados a grupos radicales, y que en todo caso ocultan la verdadera identidad de los culpables.
Aunque Kiko no se tomó excesivamente en serio estas desagradables amenazas al inicio, debido precisamente a que recibe bromas e insultos diarios por redes sociales, lo cierto es que tras su difusión en medios y redes sociales, y aconsejado por su entorno, el DJ se dispone a emprender medidas legales.