Trato de favor a Isabel Pantoja. No es una noticia de un semanario del corazón, sino la portada del diario El Mundo, que asegura que el pasado 1 de junio, el mismo día en el que la tonadillera accedió a su primer permiso, lo hizo desayunando en el economato de la prisión, un lugar prohibido para el resto de las presas, acompañada de la directora y el subdirector del centro penitenciario de Alcalá de Guadaíra. Pantoja se llegó a despedir de ellos con dos besos, asegura el diario.
Se trataría sólo de uno de los muchos privilegios de Pantoja mientras ha estado entre rejas, según funcionarios de la propia cárcel, que confirman lo denunciado por el sindicato Acaip el pasado noviembre. Según El Mundo, éstos se sienten "cohibidos y presionados" por la dirección cada vez que intentan a Pantoja cumplir las normas que el resto de las reclusas acatan. "Es escandaloso, se ponen de parte de ella, la Dirección nos prejuzga constantemente", dice un funcionario. "No tenemos autoridad ninguna y el resto de presas lo ve".
Una mayoría de los 15 encargados del módulo han solicitado el traslado de Pantoja a otra prisión por temor a que pueda pasar algo con el resto de las presas, recelosas del trato de favor a la cantante. "Al principio la adoraban, pero ya hay un mal rollo considerable". Dicen que "estamos jugando con fuego". La tensión entre los funcionarios y la dirección también ha crecido por estos desacuerdos: la reunión semanal de la directora con estos encargados ya no se celebra.
Mientras, el abogado de Pantoja, Carlos Esteban, desmiente a Europa Press todo lo que aseguran los funcionarios. "Por favor, esa manifestación por mi parte solo merecería una respuesta improcedente, así que me la callo. ¿Dónde vamos a llegar por favor? No me consta y estoy convencido de que eso es totalmente una falacia, es incierto, la verdad".
Según El Mundo, a Pantoja no se le permite salir a coser para prevenir posibles peleas... aunque "en realidad ella no cose, se lo hacen otras presas". Se trata de una de las actividades que han permitido a Pantoja obtener su primer permiso por buen comportamiento.
Aún hay más privilegios: cuando volvió a prisión el pasado día 5 se le permitió ingresar con tres bultos, no solo con uno, como está estipulado. Además, se le permitió "de forma absolutamente irregular" entrar por Comunicaciones, no por la puerta de entrada habitual de Ingresos, donde se encuentra el sistema de identificación de entrada. El cacheo también se le realiza de manera anómala, en su propia celda y no en la entrada de la cárcel, como exigen las normas.
Los funcionarios denuncian también el trato de favor a sus familiares. La misma directora, sin ir más lejos, saluda con dos besos a Kiko Rivera cada vez que aparece para visitar a su madre. La celdaque ocupa Pantoja es la única que no es doble de todo el módulo A. Y señalan que al menos una presa se ha ganado un parte por denunciar el trato de privilegio a Pantoja.
El comportamiento de Pantoja tampoco sería ejemplar, según las fuentes del diario. Los funcionarios han restado puntos a la tonadillera en el módulo de respeto pero no se atreven a levantar parte por temor a las represalias de la dirección. Todo un catálogo de conductas poco habituales que favorecen a la cantante.