Tita Cervera está radiante desde que solucionó todos sus problemas con su hijo Borja y su nuera Blanca Cuesta. Como cuenta Beatriz Cortázar en Gentestilo, la semana pasada la baronesa acudió junto al director del Museo Thyssen, Guillermo Solana, a uno de los almuerzos de la peña Cuarto Poder y habló de sus problemas y de sus planes de futuro. Además, Tita continúa insistiendo en que ni está enamorada ni está buscando el amor y aprovechó para hablar de los problemas que tuvo con Borja.
Tras siete años enfadada y sin hablarse con su hijo Borja y Blanca ahora todo está solucionado. "Soy tranquila y ya ni me acuerdo de lo que ha pasado. Del pasado solo me quedo con las cosas buenas. Entre nosotros se ha abierto una puerta que yo he traspasado para poder hablar. Sería un error que se volviera a cerrar porque la vida pasa", comenta la baronesa.
Continúa con el tema explicando que "le importa un pepino quién haya tenido la culpa, ha habido un bloqueo. Lógicamente todos somos culpables, yo también, pero hoy lo importante es que se ha solucionado". Según explica la baronesa a la periodista, "su relación con Blanca es muy buena. A su hijo le hace muy feliz por lo que tiene que llevarse con mucha inteligencia y muy educadas", declaraciones que hace pensar que su relación no es tan buena como ella quiere reflejar.
En cierto modo reconoce que uno de los puntos que han hecho que den el paso de solucionar sus problemas ha sido por un acuerdo económico: "Todo está involucrado". Añade que tuvieron un problema familiar que ha ocurrido en los últimos años, pero que no está relacionado "ni con Hacienda ni con el futuro de la colección Carmen Cervera". También reconoce que "se han liquidado las demandas que había en los juzgados por ambas partes, ya que nuestras incomprensiones no se han debido al legado Thyssen que está muy claro desde el pacto de Basilea en el 2002".
Tal y como cuenta Beatriz, Cervera le confesó que durante estos siete años no había derramado ni una lágrima por la mala relación con su hijo y nuera. "No me permito llorar, la tristeza no entra en mi vida. Cada día tomo cerca de 16 decisiones y sería un lujo venirme abajo o regocijarme en mis penas", confiesa. Además, revela que "no ha pedido perdón como tampoco lo ha exigido". Asimismo, confesa que quiere que Borja "se involucre con ella" y que le ayude con todas las decisiones para que "tome el relevo". Otro bombazo fue cuando desveló que su hijo lleva mucho tiempo "sin ver a sus hijas".