Andrés Arconada ha entrevistado en el camerino del Teatro Español, un teatro vinculado a la historia profesional de Concha Velasco, que no había vuelto allí desde la representación de Don Juan, y que ahora regresa con una tragedia como es la Hécuba de Eurípides.
Una obra llevada a cabo por el empeño personal de la actriz, que se merece casi todo el mérito de traer la obra a la capital gracias a su determinación y cabezonería. "Yo he querido hacer este espectáculo y no he permitido a Jesús Cimarro, productor independiente, que éste muriera en Mérida. Lo he conseguido", dice orgullosa. Y es que para la actriz, la verdadera tragedia y derroche sería "hacer un espectáculo tan gordo, tan caro con este, y que muera en Mérida, a mí me parece un horror". Eso sí es un derroche, hacer una obra así y no explotarla, opinó Velasco en Es Cine.
No obstante, se ha tenido que enfrentar a algunos cambios en su regreso al Español. Ahora tiene, confesó a Andrés Arconada, "un camerino casi más grande que mi casa, tengo baño, ducha, gimnasio... es extraordinario pero no se parece en nada al camerino con el que hice Don Juan Tenorio, de Zorrilla y con decorados de Dalí". Lo único que ha conseguido para "personalizarlo" es que "pongan un biombo", dijo entre risas en Es Cine.
Concha Velasco habló también con su sinceridad habitual de por qué sigue acometiendos tantos proyectos complejos pese a su veteranía, a punto de cumplir 75 años. "Yo sigo teniendo necesidades económicas que me obligan mucho a trabajar, que por suerte y gracias a mi trabajo puedo ir cubriendo, pero es algo que tengo ahí de por vida". Y ahondó más en el tema: "Cada vez que me levanto por la mañana y tengo que estudiar muchísimo, me pregunto por qué. Ahora es porque no quiero que mis hijos no se queden en la calle y hereden deudas. Quiero morirme tranquilamente en mi casa y que mis hijos me digan que me quieran y que no les he dejado debajo de un puente".
Pero en referencia a Hécuba, una obra con críticas excelentes, Concha Velasco explicó que pese a ser una tragedia, -y de hecho, "la madre de todas ellas- se trata de una obra que "la gente disfruta" y acude a ver. Pese a que está "llena de muertos desde el comienzo" y muy trágica, se trata de una obra muy "atractiva", explicó en Es Cine. Y ello es gracias al equipo que la apoya, y en concreto, de su director. "El tono, tan cercano al drama pese a ser una tragedia, es mérito del director, José Carlos Plaza", con el que ha tenido no pocas luchas pero siempre en el contexto de una colaboración voluntaria.
Es tan dramático lo que ocurre en ella, y lo que Concha Velasco se ve obligada a representar, que pese a no ser actriz de método "hay momentos en los que el dolor -porque es una madre- te deja la sensibilidad a flor de piel". Tal y como explicó, tiene que salir a escena y "saber que has perdido a tu familia, que lo has perdido todo", algo por lo que incluso el personaje de Ulises le merece un "cierto respeto".
Entre sus próximos proyectos, que son muchos, y tras su último éxito en ese medio como fue Gran Hotel, Concha volverá a la televisión con Vive cantando, rodeada de actores como José Luis García Pérez, Manolo Galiana ("otro de los grandes"), María Castro... y donde hará de madre del personaje del primero. "Yo soy fan de la serie, había visto todos los capítulos", reveló la actriz a Andrés Arconada. Y es que Velasco se confesó como una espectadora habitual, y como muestra, un botón: "El otro día ví Galerías Velvet y me pareció estupenda, me gustó muchísimo Paula Echevarría, y eso que mi sobrina estaba estupenda".