Rosa Benito ha vuelto a la televisión y, como muchos otros, lo ha hecho por la puerta grande, concediendo una entrevista para Sálvame Deluxe. Tenía muchos frentes abiertos, como porqué fue realmente hospitalizada hace dos meses; cómo va el divorcio con Amador; si se están dando una segunda oportunidad o qué ha pasado con su buena amiga Belén Esteban con quien estaba enfadada. Por eso, la cuñada de Rocío Jurado quiso aclarar todo este viernes y hablar sin tapujos de cómo se encuentra y de todos sus problemas.
Todos los colaboradores de Sálvame y amigos de Rosa prometieron que "iban a darle caña" para que hablase de todos estos asuntos, pero al verla, se les ablandó el corazón y prefirieron escucharla con atención, a excepción de María Patiño, que no pudo evitar ser crítica. Sobre las 10.20 de la noche, Rosa Benito bajó, nerviosa y emocionada, las escaleras del plató y nada más sentarse reconoció que "le había costado entrar" porque sabía que no iba a ser fácil hablar de ciertas cuestiones.
Una de las primeras preguntas de Jorge Javier fue si "intentó suicidarse" y, aunque Rosa Benito evitó pronunciar ciertas palabras, acabó declarando que "quiso quitarse de en medio" tomándose "una caja entera de Lexatin de golpe". Explicó desde el principio, entre lágrimas, que ella intentaba aparentar que estaba muy bien, pero que en realidad "estaba hecha una mierda". "He intentado descansar. Yo he hecho mucho daño a mí, a mi familia y a la gente que me rodea. Y llegó un día en que me veo completamente perdida y me dio cuenta de que destruyo todo a mi alrededor. Así que, estaba sola en mi casa y sí, quería descansar, descansar...." reveló la colaborado de Sálvame.
Reconoció que llevaba mal mucho tiempo porque se culpaba de "romper una familia". Cada vez que se hablaba de este tema ella no podía aguantar la emoción y acaba llorando. Llega un momento en el que dice que para ella "la vida no valía y vi que todo estaba roto por mi culpa".
Rosa Benito explica cómo fue ese trágico día
El presentador le pidió que hablase del día que decidió acabar con todo. Declaró que lo primero que hizo fue llamar a su hijo Amador "para despedirse" y corroboró que "pensó que lo mejor era desaparecer por todo el daño que estaba haciendo". Así que, después de esa llamada decidió tomarse una caja entera de Lexatin para "no parar de dormir". Su hermana sabía que estaba pasando una mala racha y por eso iba a verla constantemente. Ese día también acudió a su casa, pero Rosa no le abrió la puerta. Se puso nerviosa y, cuando consiguió entrar, "la encontró en posición fetal" y al instante la llevaron al hospital. Le hicieron un lavado de estómago rápidamente. Aclaró que llegó a tener "una parada cardiorrespiratoria", es en ese preciso instante cuando todos sus compañeros se dan cuenta de que lo que hizo Rosa Benito no fue un intento de llamar la atención, sino que realmente no quería seguir viviendo.
Sigue narrando aquel día y reconoce que, una vez en el hospital, la primera persona que ve es a Amador. Aclaró que fue su hermana la que le llamó sin que ella se lo pidiera. Nada más verse se dieron un abrazo y, sin decirse nada, acabaron llorando juntos. Más tarde, hablaron tranquilamente y se pidieron perdón por todo lo que se habían hecho. Continuó desvelando que "Amador y yo no estamos juntos. Ahora no podemos volver, no por él ni por mi. Nuestra relación ha mejorado mucho pero no estamos juntos". Y negó rotundamente que se hubieran acostado en estos dos meses.
Su relación con Amador Mohedano
Este jueves, Kiko Matamoros aseguró que Rosa Benito y Amador Mohedano se estaban dando una segunda oportunidad y que no lo hacían público porque les daba miedo las críticas que iban a recibir. Éste reconoció que se enteró de esta información por familiares de Amador y por comentario de Chayo Mohedano -hija de ambos-. "Me dicen que estáis en un momento de prueba y que por pudor no queréis decirlo", explicó Matamoros.
Rosa aclaró que "eso era mentira" y que a día de hoy "lo único que van a hacer es separarse". Además, comentó que el 13 de diciembre es la fecha que le dan para ratificar el divorcio, que fue la que le dieron en su día. Asimismo, reveló que Amador había vendido la casa de Chipiona para comprarse un piso en Madrid para estar más cerca de sus hijos.
El enfado con Belén Esteban
Todavía no se sabe qué fue lo que pasó entre la de San Blas y Rosa. Eran mejores amigas y "se partían la cara la una por la otra", pero últimamente estaban muy distanciadas. Se rumoreó que Belén se enfadó porque la cuñada de Rocío Jurado no le había felicitado por su 40 cumpleaños, pero suena surrealista que pueda ofenderle por algo así cuando Benito no estaba pasando por su mejor momento. La Esteban aprovechó esa noche para decirle que iban a arreglarlo todo y que lo que tenga que decirle se lo diría a solas, porque nadie más tenía que enterarse. Además, aseguró que le dolió darse cuenta de que sus compañeros sabían cosas que a ella nunca le había contando. Pero, todo se olvidó cuando las dos se fundieron en un abrazo.