Ni la reina Sofía ni la infanta Elena presidirán junto a los príncipes de Asturias el desfile del Día de la Hispanidad. Ha sido el propio rey Juan Carlos el que ha tomado la insólita decisión de eliminar del palco a su mujer e hija y dejar solos a los príncipes de Asturias. Y eso que hace solo unos días el jefe de la Casa del Rey dejó bien claro que las funciones de Jefe de Estado no son delegables, y que Felipe no puede de ninguna forma ejercer de sustituto de su padre. Por eso no se sabe si la decisión del Rey es su manera de vengarse de Sofía, de demostrar su enfado por no poder ir, o de dejar solo a su heredero. Pero la escena, sin duda, va a ser rara. Va a ser la metáfora de lo solos que están Felipe y Letizia en todo esto.
Mientras, Corinna ha encontrado ya a otro miembro de la realeza al que asesorar: Alberto de Mónaco. Da igual que sea un principado y no un reino, que esté casado o que haya sido cuestionado en infinidad de ocasiones por sus preferencias sexuales: la amiga entrañable del rey Juan Carlos acompaña ahora a Alberto y Charlenne en sus viajes oficiales, el último por Rusia. Dicen que realmente es a la nadadora a la que asesora.
Al final Kiko Rivera rompió este viernes el voto de silencio que hizo cuando nació su hijo Francisquito, y volvió a pisar un plató de televisión. Era cuestión de tiempo, él nació en el ¡Hola! El hijo de Isabel Pantoja ha cobrado, dicen, entre 150.000 y 200.000 euros, que se ganó con la media docena de titulares que proporcionó en una de las noches de mayor audiencia que recuerda Telecinco: el Sálvame Deluxe logró un 21,4% de espectadores, la mejor cifra de este año, superando incluso el (penúltimo) regreso de Belén Esteban. De entre todo lo que dijo, quizá lo más importante es que no mantiene apenas relación con sus hermanos, y que no fue a la boda de Fran porque no le invitaron. Reconoció que está "cansado de ser el imbécil de la familia".
Kiko también habló de la mala relación que mantiene con la madre de su hijo, Jessica Bueno. Telecinco está filtrando las imágenes grabadas durante las pausas de publicidad, en las que se ve a Kiko Rivera preguntándose si lo que está contando en la entrevista puede afectar en el caso de la custodia de su hijo. "Que la den, poco estoy diciendo", llega a decir en un momento el DJ.