El otro día Beatriz Trapote vivió uno de los peores momentos de su vida, parecido al día que le echaron de un plató de Telecinco. La periodista acudió al pueblo de Arroyomolinos, y no fue precisamente piropos y sonrisas con lo que se encontró a su llegada.
Al principio, todo iba con normalidad. La Trapote estaba "inmersa en el pregón", según Chance. Pero, de repente comenzaron los abucheos por parte de los habitantes de Arroyomolinos. Por lo visto, la reportera vio un buen momento hacer promoción de su negocio de uñas en medio del pregón.
Hace poco que la parejita, Víctor Janeiro y Beatriz Trapote, decidieron montar un negocio, por si iba peor las cosas con la crisis. Los habitantes del pueblo no vieron con buenos ojos esta publicidad que poco tenía que ver con lo que se estaba celebrando. Todos empezaron a "criticarla y pitarla para que se callara y se fuera", asegura Chance.
Sin embargo, Beatriz Trapote, llena de ingenio, se dio cuenta de que ese no era el momento y decidió cambiar el rumbo del discurso, e intentar animar la fiesta y conseguir que el ritmo no decayera.