Blanca Cuesta, la mujer de Borja Thyssen, dejó de un lado la moda para centrarse en su nueva faceta, la de pintora, que le acaba de reportar su primer éxito en ARCO, la Feria de Arte Contemporáneo.
Blanca empezó pintando cuadros infantiles que ahora decoran las habitaciones de sus pequeños Sacha, Eric y el recién nacido Enzo. Pero ahora la mujer de Borja ha dado un paso más allá y se ha atrevido con la pintura abstracta. A la vista de todos, Blanca mostró su obra en la octava edición de Art Madrid acompañada de su principal apoyo, Borja Thyssen. Su cuadro Flúor Inspiration I fue adquirido pocos minutos después de salir a la venta por el nada despreciable precio de 4.000 euros.
Tal y como reveló Beatriz Cortázar en la Crónica Rosa de Es la mañana de Federico, el cuadro, pintado al óleo, fue expuesto y se vendió casi al momento por 4.000 euros.
Cortázar dijo que la mujer de Borja solo firma sólo como "Cuesta, pero a veces no lo firma o los firma por detrás". "No se sabe quién lo ha comprado, sólo que es un coleccionista de América Latina que no quiere ser identificado", reveló la periodista en esRadio. Negó también que se encontraran en un restaurante, tal y como publicó la revista Lecturas.
La propia Blanca ha revelado que el cuadro fue "casi el primero de la feria" en ser vendido. Aunque "más que venderlo, lo que me hace ilusión es que a la gente le guste".
Feliz y risueña, Blanca se interesó por los cuadros y esculturas de otros compañeros. Allí posó radiante junto a su obra y al que ha sido su maestro, Pedro Sandoval.
La pareja aseguró que los niños se llevan muy bien y que no hay celos entre ellos tras la llegada de Enzo. "Ya lo han incluido totalmente en la familia y lo pasamos genial" y comentaron que celebrarán el bautizo del niño cuando tengan un hueco.