El reality de moda en la televisión, Pesadilla en la cocina, no está salvando tantos restaurantes como a su estrella, Alberto Chicote, le gustaría. Tal y como publica El Confidencial Digital, la semana pasada se supo que el Castro de Lugo había cerrado sus puertas, ahora ha sido el Nuevo Da Vinci, ubicado en Moraira (Alicante) el que cierra sus puertas.
No obstante, el propietario del establecimiento, Rafa, esta vez se pone en el centro de la polémica e incluso acusa al chef televisivo del fracaso del restaurante. Dice que los cambios en la carta que efectuó Chicote no fueron del gusto de los clientes de la zona y que su "visita no ha servido para nada".
Además, tampoco está de acuerdo en el tratamiento de su figura que se hizo en el programa. Rafa considera que Pesadilla en la cocina se centró demasiado en su vida personal fuera del restaurante, y no en su actividad estrictamente profesional.
El propietario también reprocha a Chicote que el equipo del programa le pidió que no limpiara el restaurante en unos días para poder grabar el programa. Tal y como publica El Confidencial Digital, no se trata de la única sorpresa relacionada con el programa: el dueño del restaurante Domine Cabra, ubicado en el madrileño barrio de las letras y protagonista de otra de las ediciones del programa, falleció a causa de una enfermedad, y su local ha cambiado el nombre y el tipo de cocina: según el diario, ahora se llama Distrito Centro.