EDITORIAL 2
Hasta que no se levante el veto del que disfrutan algunas corporaciones privadas dependientes del presupuesto público y las más altas instituciones del Estado, nadie podrá decir con propiedad que España es un país transparente.
César Vidal
Puede irritar a algunos, pero lo cierto es que el hecho de convertirse en espada de la Contrarreforma tuvo consecuencias verdaderamente catastróficas para España que llegan hasta el día de hoy. De entrada, perdió su imperio y se arruinó.
Francisco Cabrillo 2
Creo que todavía, en nuestro país, los costes de salida del euro serían sustancialmente mayores que los que el ajuste interno requiere. Pero este ajuste hay que hacerlo. ¿Habría sido menos penoso fuera del euro? Seguramente.
Carlos Rodríguez Braun 1
Méndez condena la subida de tasas universitarias pero no presta ninguna atención al muro que deben sortear las familias para financiar la educación universitaria o a que la sociedad civil descubrió las becas para estudiantes pobres hace varios siglos.
José García Domínguez
No estamos hablando de Krugman ni de tertulianos del tres al cuatro, sino del poder. Del poder de verdad. De un poder aterrado que, ante la inminencia cierta del Apocalipsis, quizá empieza a descreer de su propio cuento de hadas austeras.
Emilio Campmany
Arbitrar el modo legal de que la diáspora vasca vote en el País Vasco es un modo eficaz de combatir a ETA y a su brazo político. Es obvio que los resultados de las elecciones serán para éstos, si los exiliados votan, mucho peores que si no lo hicieran.
Agapito Maestre
Quien no se haya enterado de la relevancia de la crisis, o quien la oculta ideológicamente, falsamente, para aprovecharse de ella personalmente, está contribuyendo a que vivamos instalados en la barbarie animal.
Pedro de Tena
Propongo una nueva definición de los números primos: "Dícese de aquellos números que se cuentan a los ciudadanos de un país, de ahí lo de primos, para que no tengan nunca ni puta idea de lo que realmente pasa".
Fundación Heritage
Es una lástima que Estados Unidos y Europa decidiesen lo contrario, desoyendo el consejo de los suecos. Mire cómo les va a ellos por recortar impuestos y mire cómo nos va a los demás por ser keynesianos.
GEES
Pagar las deudas con dinero falso y estimular el consumo distribuyendo ese dinero entre la clientela electoral izquierdista y regalar servicios estatales impagables no es más que euforia momentánea.