LD (Agencias) En el Informe Anual de 2007, la autoridad monetaria española indica que es necesario adoptar medidas para aumentar el "grado de contributividad" del sistema público de pensiones y fomentar "el desarrollo de sistemas complementarios", ante unas finanzas públicas que se enfrentarán a "importantes retos" en el medio y largo plazo, como consecuencia de la presión sobre el gasto público que ejercerá el envejecimiento de la población.
En su discurso de presentación del Informe, Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO) destaca que las tasas de inflación superiores al 4 por ciento suponen una fuerte merma en el poder adquisitivo de la población, desanima el consumo corriente e induce un efecto negativo sobre la confianza de los agentes. En este sentido, señala que es poco probable que en el futuro inmediato haya correcciones significativas de los precios de la energía y de los alimentos, que seguramente, a su juicio, se mantendrán elevados.
Respecto al diferencial de precios de España con la Unión Económica y Monetaria (UEM), asegura que desde hace tiempo exige una corrección, "particularmente apremiante" cuando la economía española requiere un ajuste de los desequilibrios pasados.
Respecto al diferencial de precios de España con la Unión Económica y Monetaria (UEM), asegura que desde hace tiempo exige una corrección, "particularmente apremiante" cuando la economía española requiere un ajuste de los desequilibrios pasados.
El informe destaca que la política presupuestaria se encuentra en una situación adecuada para que puedan funcionar los mecanismos automáticos de estabilización en la nueva fase cíclica. Sin embargo, aboga por evitar actuaciones de signo expansivo que impliquen un aumento del gasto público o una reducción de los impuestos que vayan más allá de los propios estabilizadores automáticos.
La entidad supervisora destaca que el funcionamiento del mercado de trabajo determinará, en gran medida, la capacidad de ajuste de la economía. En este sentido, defiende la progresiva eliminación de las rigideces existentes, adecuando los incrementos salariales a los aumentos de la productividad y abordando algunas de las reformas pendientes en el ámbito de la contratación, de manera que se elimine la segmentación actual.
En su opinión, a estas medidas, debe unirse una mejora en la formación de los trabajadores que incremente su productividad –que Fernández Ordóñez no espera que se recupere a corto plazo- y que facilite su adaptación ante cambios en las necesidades de la demanda. Además, defiende que continúe el aumento del grado de competencia en los distintos sectores de la economía, con políticas de liberalización y de desregulación .