L D (EFE) Ante la comisión de Presupuestos del Senado, Caruana recordó que, según los datos de la Contabilidad Nacional difundidos este miércoles, la economía creció en el tercer trimestre el 2,6 por ciento, igual que en el periodo precedente, y consideró "posible" que la tasa para el conjunto del año "no difiera, significativamente, de ésta", mientras que el año próximo los resultados dependerán de cómo se desenvuelva la economía mundial y, en concreto, la europea.
Caruana aludió a los aspectos "menos favorables" del patrón de crecimiento que hay que "reconducir" para garantizar la continuidad de la fase expansiva y, así, se refirió, entre otros, a la debilidad del sector exterior y el turismo, las tensiones inflacionistas, que afectan a la competitividad, y el endeudamiento de las familias.
En su opinión, "poco podemos hacer" desde España para limitar los riesgos que provienen del exterior -entre los que destacó una subida adicional del petróleo, vacilación en la recuperación europea y una apreciación excesiva del euro-, pero "sí es posible y necesario" afrontar los internos, mediante políticas orientadas a la estabilidad, a encauzar la demanda de los hogares y a fomentar la inversión productiva y la competitividad.
En su opinión, "poco podemos hacer" desde España para limitar los riesgos que provienen del exterior -entre los que destacó una subida adicional del petróleo, vacilación en la recuperación europea y una apreciación excesiva del euro-, pero "sí es posible y necesario" afrontar los internos, mediante políticas orientadas a la estabilidad, a encauzar la demanda de los hogares y a fomentar la inversión productiva y la competitividad.
Una combinación de políticas monetaria y fiscal menos holgada, dijo Caruana, contribuiría a reducir los problemas de competitividad -pues favorecerá la contención de precios y costes en los sectores con menos competencia-, de encarecimiento de la vivienda y de endeudamiento de las familias. A este respecto, constató que este año se ha acelerado la financiación a los hogares, impulsada por el fuerte aumento del crédito hipotecario, vinculado, a su vez, al precio de la vivienda que, admitió, "tampoco ha dado señales de moderación".
Insistió en que, aunque la posición patrimonial de las familias sigue siendo sólida, debido fundamentalmente a la revalorización de los activos inmobiliarios, sigue aumentando su sensibilidad a un eventual aumento de los tipos de interés, una desaceleración del empleo o una corrección de la sobrevaloración de la vivienda. Sobre la política presupuestaria, afirmó que debe alcanzarse en el 2005 el objetivo de superávit (del 0,1 por ciento del PIB) para el conjunto de las administraciones, incluso si el crecimiento es menor al tres por ciento previsto en los presupuestos.
En todo caso, Caruana advirtió de que el tono de la política fiscal programado para 2005 "podría resultar insuficiente" para corregir la orientación moderadamente expansiva de la misma durante este año y confió en que se aprovechen todas las oportunidades para profundizar en la consolidación presupuestaria, evitando desbordamientos de las cifras programadas, aun cuando el crecimiento sea menor de lo previsto.
Respecto a la vivienda, el gobernador reclamó que las medidas para favorecer el acceso vayan acompañadas de reformas para incrementar la flexibilidad de la oferta, cuestión que depende fundamentalmente de la regulación del mercado del suelo. Sobre el mercado laboral, dijo que "la inercia y rigidez" de los mecanismos de determinación salarial y algunos otros elementos de inflexibilidad hacen necesaria una profundización en las reformas.
Insistió en que, aunque la posición patrimonial de las familias sigue siendo sólida, debido fundamentalmente a la revalorización de los activos inmobiliarios, sigue aumentando su sensibilidad a un eventual aumento de los tipos de interés, una desaceleración del empleo o una corrección de la sobrevaloración de la vivienda. Sobre la política presupuestaria, afirmó que debe alcanzarse en el 2005 el objetivo de superávit (del 0,1 por ciento del PIB) para el conjunto de las administraciones, incluso si el crecimiento es menor al tres por ciento previsto en los presupuestos.
En todo caso, Caruana advirtió de que el tono de la política fiscal programado para 2005 "podría resultar insuficiente" para corregir la orientación moderadamente expansiva de la misma durante este año y confió en que se aprovechen todas las oportunidades para profundizar en la consolidación presupuestaria, evitando desbordamientos de las cifras programadas, aun cuando el crecimiento sea menor de lo previsto.
Respecto a la vivienda, el gobernador reclamó que las medidas para favorecer el acceso vayan acompañadas de reformas para incrementar la flexibilidad de la oferta, cuestión que depende fundamentalmente de la regulación del mercado del suelo. Sobre el mercado laboral, dijo que "la inercia y rigidez" de los mecanismos de determinación salarial y algunos otros elementos de inflexibilidad hacen necesaria una profundización en las reformas.