LD (EFE) El banco europeo ha mostrado su preocupación por el fuerte encarecimiento del precio del petróleo y ha asegurado que mantendrá una estrecha vigilancia. El BCE apuntilló que "es importante que la política monetaria prevenga la aparición de presiones inflacionistas" y que evite la aparición de los llamados efectos de segunda vuelta, que se producirán, por ejemplo, con la subida de los salarios.
El impacto íntegro del encarecimiento del crudo sobre los precios y la actividad económica dependerá de la evolución de los salarios, así como de la política fiscal, afirma la entidad monetaria europea. En este sentido, el BCE advierte de que los precios del petróleo van a seguir siendo un factor de riesgo importante para la inflación y la actividad económica de la zona euro, y en caso de permanecer a los niveles actuales o subir más podrían frenar el ritmo de crecimiento económico fuera y dentro del área euro.
No obstante, el banco europeo añade que el reciente incremento de estos precios ha sido "significativamente más pequeño que en ocasiones anteriores", cuando la subidas tuvieron un impacto mayor en la economía mundial. En términos reales, los precios del crudo están muy por debajo de los máximos alcanzados en el pasado . Esto, unido a la apreciación del euro respecto al dólar, a la menor dependencia del petróleo y al incremento de la flexibilidad del mercado laboral ha permitido, según el BCE, que la economía de la zona euro no haya sido afectada de forma significativa.
El impacto íntegro del encarecimiento del crudo sobre los precios y la actividad económica dependerá de la evolución de los salarios, así como de la política fiscal, afirma la entidad monetaria europea. En este sentido, el BCE advierte de que los precios del petróleo van a seguir siendo un factor de riesgo importante para la inflación y la actividad económica de la zona euro, y en caso de permanecer a los niveles actuales o subir más podrían frenar el ritmo de crecimiento económico fuera y dentro del área euro.
No obstante, el banco europeo añade que el reciente incremento de estos precios ha sido "significativamente más pequeño que en ocasiones anteriores", cuando la subidas tuvieron un impacto mayor en la economía mundial. En términos reales, los precios del crudo están muy por debajo de los máximos alcanzados en el pasado . Esto, unido a la apreciación del euro respecto al dólar, a la menor dependencia del petróleo y al incremento de la flexibilidad del mercado laboral ha permitido, según el BCE, que la economía de la zona euro no haya sido afectada de forma significativa.