L D (EFE) El BCE ha reiterado que el elevado precio del petróleo creará importantes riesgos a la baja sobre la reactivación de la economía y ha insistido en que la entidad se mantendrá muy vigilante. Al mismo tiempo, las exportaciones de la zona euro, que contribuyeron en gran medida a la reactivación económica de la primera mitad del año, han perdido fortaleza en el tercer trimestre del año.
Otros datos macroeconómicos, como la tasa de desempleo de la zona euro, o de economías como la alemana o la española, tampoco presentan un panorama muy halagüeño para la economía del área euro. El índice de desempleo de los doce países que comparten el euro se mantuvo en septiembre en el 8,9 por ciento, el mismo nivel que en agosto, según la Oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat. En la comparación interanual el paro también permaneció estable en la zona euro.
Sin embargo, la tasa de desempleo subió en Alemania, primera economía del área euro, en octubre hasta el 10,1 por ciento de la población activa, una décima más que en el mismo periodo del año anterior. Los analistas prestarán hoy gran atención a la valoración que el presidente de la entidad monetaria, Jean Claude Trichet, haga del peligro de desequilibrios para el crecimiento de la economía derivados de encarecimiento del crudo. La entidad monetaria se enfrenta a una economía que se recupera lentamente y que adolece de presiones inflacionistas, por lo menos a corto plazo, derivadas de los elevados precios del petróleo, que además podrían ralentizar aún más el ritmo de crecimiento.
Analistas del Commerzbank prevén una tendencia alcista de los tipos a medio plazo y consideran que el BCE comenzará a subirlos en el segundo trimestre de 2005 en un 0,25 por ciento. El euro se cambiaba a 1,2867 dólares después de que el banco europeo diera a conocer su decisión, sin modificaciones, pero por encima del nivel de la apertura. La moneda única ganó hoy terreno frente al billete verde y se acercó a su valor máximo histórico de 1,2930 dólares, logrado el 19 de febrero. Un operador del mercado de divisas de Fráncfort explicó que en el mercado hoy se rumoreó que un banco central grande de Oriente Medio ha comprado euros contra dólares. El Banco de Inglaterra mantuvo hoy también inalterados los tipos de interés en el 4,75 por ciento.
Otros datos macroeconómicos, como la tasa de desempleo de la zona euro, o de economías como la alemana o la española, tampoco presentan un panorama muy halagüeño para la economía del área euro. El índice de desempleo de los doce países que comparten el euro se mantuvo en septiembre en el 8,9 por ciento, el mismo nivel que en agosto, según la Oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat. En la comparación interanual el paro también permaneció estable en la zona euro.
Sin embargo, la tasa de desempleo subió en Alemania, primera economía del área euro, en octubre hasta el 10,1 por ciento de la población activa, una décima más que en el mismo periodo del año anterior. Los analistas prestarán hoy gran atención a la valoración que el presidente de la entidad monetaria, Jean Claude Trichet, haga del peligro de desequilibrios para el crecimiento de la economía derivados de encarecimiento del crudo. La entidad monetaria se enfrenta a una economía que se recupera lentamente y que adolece de presiones inflacionistas, por lo menos a corto plazo, derivadas de los elevados precios del petróleo, que además podrían ralentizar aún más el ritmo de crecimiento.
Analistas del Commerzbank prevén una tendencia alcista de los tipos a medio plazo y consideran que el BCE comenzará a subirlos en el segundo trimestre de 2005 en un 0,25 por ciento. El euro se cambiaba a 1,2867 dólares después de que el banco europeo diera a conocer su decisión, sin modificaciones, pero por encima del nivel de la apertura. La moneda única ganó hoy terreno frente al billete verde y se acercó a su valor máximo histórico de 1,2930 dólares, logrado el 19 de febrero. Un operador del mercado de divisas de Fráncfort explicó que en el mercado hoy se rumoreó que un banco central grande de Oriente Medio ha comprado euros contra dólares. El Banco de Inglaterra mantuvo hoy también inalterados los tipos de interés en el 4,75 por ciento.