(Libertad Digital) Pío Moa destacó que le llamó la atención el “tono entusiasta” que reflejaron los socialistas ante la Guerra Civil, “el cinismo con el que la preparaban”. Para el autor, “los socialistas iban a la guerra porque consideraban que la iban a ganar” ya que pensaban que no había peligro de fascismo en España. “Habían aceptado la república como un paso hacia la revolución”, dice Moa.
Tras el éxito de ventas de “Los mitos de la Guerra Civil”, Pío Moa analiza en “1934: Comienza la Guerra Civil” (editorial Altera) la revolución de Asturias, cuya efemérides se celebra este miércoles, y la secesión de Cataluña y defiende que fueron socialistas y nacionalistas quienes se sublevaron contra la democracia republicana apoyándose en abundantes pruebas gráficas y documentales.
Moa asegura que la revolución de Asturias tenía el objetivo de triunfar en Madrid, “fue un intento de revolución en toda España y fracasó porque la gente no la siguió, porque no había clima de guerra y nadie los hizo caso”. Pero se materializó dos años después. “Los socialistas no sólo quisieron y planificaron la guerra civil, si no que la llevaron a cabo”, afirma rotundamente Moa. El historiador criticó el intentó de la izquierda de que sean otros “los que pidan perdón” y aseguró que si el PSOE reconociera que fueron ellos los que iniciaron la guerra “ya no serían ellos”.
Preguntado por si está de acuerdo con Angel Acebes en que vivimos un momento parecido al 36, Moa dijo que “hay diferencias importantes. No hay la violencia de entonces, la sociedad no está tan dividida”. Sin embargo, denunció que sí hay un “intento de recuperar los odios de entonces que habían desaparecido de España” y acusó a los socialistas de utilizar la Guerra Civil como un “arma contra la derecha porque la izquierda cree que la guerra civil les legitima a ellos y deslegitima a la derecha”. “Recuperar los odios del 36 es muy peligroso”, advirtió.
Un debate denegado
Moa demandó un debate sobre este momento histórico, debate que le niegan otros historiadores porque no es académico y le consideran un “historiador aficionado que sólo quiere hacerse propaganda”. Sin embargo criticó la interpretación que hacen de la historia y en particular de la Guerra Civil otros historiadores –citó expresamente a Javier Tusell- y aseguró que su intención es “que la gente tenga una idea más clara del pasado y que no se utilice para enrarecer el presente. Es peligroso engañar sobre el pasado porque influye en el presente”, afirmó.
En la presentación estuvieron el director de Ediciones Altera, Javier Ruiz Portella, el periodista Carlos Dávila y el historiador de la Universidad San Pablo-CEU José Luis Orella. Dávila destacó de Pío Moa el “respeto que como periodista tiene por el dato” y recordó la “nube de agresión” que levantó contra él por el modo de contar la historia en “Los mitos de la Guerra Civil”. “Pío Moa”, dijo “pide el debate y la confrontación de ideas y se le niega porque no es historiador. Pido respeto para un autor riguroso”, añadió.