LD (Agencias) Miles de venezolanos forman largas colas en todo el país para emitir su voto en los 8.400 centros receptores de voto. El ambiente es festivo y transcurre con tranquilidad. Las autoridades de la Junta Nacional Electoral sólo han destacado incidentes menores en la instalación y apertura de las casillas donde unos catorce millones de ciudadanos deciden si el presidente Hugo Chávez continúa en el cargo hasta el diez de enero de 2007 o debe abandonarlo de inmediato y convocar elecciones presidenciales..
Los agentes de la Policía y del Ejército, asignados al "Plan República", custodian las mesas receptoras. Durante las primeras horas no se han registrado incidentes o actos de violencia incluso en los sectores donde la oposición o los "chavistas" gozan de una presencia mayoritaria. En varias partes de Caracas se lanzaron cohetes desde más de una hora antes de la apertura de los centros para estimular a los votantes.
Retraso excesivo en la votación
Las maquinas "cazahuellas" (utilizadas para evitar que una persona vote en más de una ocasión) instaladas por la JNE en todos los centros receptores, están retrasando en exceso el proceso. Según informa la caraqueña estación de radio Universitaria FM, en el chequeo dactilar al que son sometidos los ciudadanos "se pierde mucho tiempo. Hay un promedio de unos tres minutos por persona". La radiodifusora, con reporteros destacados en varios puntos del país, informó de que en varias mesas se registran colas con ochocientos o más ciudadanos.
Mediante un comunicado de prensa, la JNE ordenó a todos los centros de votación en los que esté retrasado el proceso, a realizar la captación de huellas después de que el ciudadano ejerza su voto, es decir, colocar ese paso al final y no al principio. Otra medida es extender dos horas más el horario de cierre de las urnas. De las seis de la tarde pasará a las ocho de la noche. El vicepresidente del Consejo Nacional Electoral, Ezequiel Zamora, precisó que el objetivo es "garantizar el derecho al voto en forma eficaz". Incluso, Oscar Battaglini, directivov del CNE, declaró que el referendo puede llegar a ser la votación de "mayor concurrencia en la historia electoral del país".
Cerca del mediodía, Jorge Rodríguez, presidente de la JNE, declaró a los medios de comunicación que se habían contabilizado abiertos un 98.7 por ciento de los centros de votación que se tenía contemplado instalar hasta las diez y media de la mañana. El porcentaje restante correspondería a las zonas rurales lejanas donde la comunicación es difícil. Destacó que son "cifras récord en la instalación de las mesas". Precisó, además, que el 99 por ciento de las máquinas receptoras están cumpliendo sus responsabilidades por lo que, dijo, se puede calificar al proceso como "sencillo y rápido".
Resistir en las colas
El secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, destacó que el referendo es la salida electoral al conflicto político que el país arrastra desde hace varios años. Junto con el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, Gaviria visitó el liceo Andrés Bello, en el centro de la capital venezolana, para observar el funcionamiento de la votación. A su salida, declaró a los medios de comunicación que "esto demuestra que finalmente el país va a encontrar en esta solución electoral la salida al conflicto político". Carter afirmó, por su parte, que nunca había visto colas tan largas y bien ordenadas.
En Caracas, el líder de la opositora Coordinadora Democrática, Enrique Mendoza, dijo que "todo está funcionando perfectamente" y pidió paciencia a sus seguidores para que permanezcan en la colas a pesar del cansancio. Rechazó que, al margen del retraso de las máquinas capta huellas, se hayan presentado inconvenientes y pidió que "si no pasa nada no nos pongamos a inventar problemas". Pompeyo Márquez, otro de los dirigentes opositores, llamó a los venezolaos a "resistir en las colas". Las "cazahuellas", que costaron 66 millones de dólares y no estuvieron bajo proceso de licitación, fueron colocadas para hacer más transparente el proceso y evitar que una persona pueda votar más de una vez. Algunos canales de televisión recibieron denuncias según las cuales las máquinas de votación habrían cambiado el sentido del sufragio en algunos casos.
Hugo Chávez votó en el populoso barrio caraqueño de "23 de enero". A la salida, dijo a los reporteros presentes que el proceso de este domingo es una respuesta a "todos los que dijeron que el dictador Chávez no aceptaría el referendo, que no aceptaría contarse ni reconocería las firmas para el referendo". El mandatario subrayó que en su país "es imposible un pinochetazo", en alusión al golpe de Estado en Chile en 1973. Horas antes, a las seis en punto de la mañana, Chávez entró por teléfono en el canal estatal Venezolana de Televisión. Desde allí, animó a los ciudadanos a acudir a los centros de votación con alegría y en paz. Sin el tono agresivo de los últimos días, explicó que sea cual sea el resultado del referendo, "será una gran victoria para Venezuela".