L D (Agencias) Pese a que José Borrell está haciendo de la guerra de Irak uno de los argumentos de su campaña para las elecciones del 13 de junio, y que desde el Gobierno el ministro Montilla le está secundando, la número dos de la lista no cree que sea una buena estrategia. En una entrevista concedida a Europa Press, Rosa Díez sostiene que sobre el regreso de tropas no se debería hablar en campaña más que lo "estrictamente necesario", para "reforzar" que el PSOE es una partido serio que cumple lo que promete "y no para que nos vuelvan a votar porque han vuelto los soldados, como si tuviéramos necesidad de reconfirmar lo que ya está confirmado".
También en contradicción con algunos miembros de su partido, niega que las del 13 de junio sean una "segunda vuelta" de las legislativas de marzo. En este caso huye de cualquier responsabilidad de su partido y la descarga en el PP. Pasa por alto las denuncias que ha hecho el propio Mayor Oreja para que los socialistas dejen de presentar así los comicios y apunta que los populares lo plantean así para movilizar a sus simpatizantes, cuando supone "una falta de respeto a los electores, y también de confianza sobre criterios propios".
Rosa Díez explica que no favorecer la táctica de presentar el 13-J como una "segunda vuelta" del 14-M no es contradictorio con "defender que hay un impulso de cambio en España que se vio en las generales y que hay muchas posibilidades de que se vuelva a explicitar en las europeas, como ocurre casi siempre cuando hay un cambio de ciclo y de acción política".
La dirigente socialista resta importancia al hecho de que el presidente del Gobierno haya renunciado, en favor de Roma, a que Madrid sea el lugar escogido para la firma de la primera Constitución Europea, algo que a su juicio responde a una reflexión moral profunda de Zapatero. Menos comprensivo ha sido el cabeza de cartel. José Borrel no dudó en mostrar su sorpresa por el cambio de postura de Zapatero aunque silenció las críticas.