(Libertad Digital) Al parecer, los agentes viajaron sin el consentimiento ni conocimiento de los dirigentes (todavía en ese momento) del Centro Nacional de Inteligencia y comunicaron la decisión tomada por José Luis Rodríguez Zapatero de retirar las tropas. La decisión fue silenciada en España hasta este domingo.
El viaje y las negociaciones se realizaron la pasada semana en Nayaf con el conocimiento de responsables del Partido Socialista, según La Razón. En dicha información se asegura que Muqtada al-Sadr pidió que Zapatero realizase el anuncio nada más tomar posesión para que EEUU se quedase sólo en el asalto a la ciudad para capturarle. De confirmarse la noticia, este acuerdo del PSOE con los responsables de los secuestros y asesinatos de varios civiles y soldados en Irak sería considerado como una traición por parte de sus aliados. Los hechos parecen confirmar la información. Horas después de que el presidente del Gobierno español anunciase la vuelta de los soldados, Al-Sadr ordenó que no se atentara contra los españoles en retirada.
La información de Enrique Montánchez en La Razón explica que tras el 11-M y los sucesos que llevaron a la victoria electoral del PSOE tres días después el servicio secreto español se ha dividido en dos facciones. Por un lado, la llamada vieja guardia, que guarda lealtad al PSOE, ya que hicieron carrera con Felipe González. Todavía tienen cargos de responsabilidad nombrados por el antiguo director del CESID, el general Emilio Alonso Manglano. Por otro, los nuevos miembros incorporados por el primer civil director del Centro Nacional de Inteligencia, el diplomático Jorge Dezcallar.