LD (Agencias) Según la agencia de noticias DPA, un portavoz de la Fiscalía dijo que existe la sospecha de que Welteke se haya beneficiado por haber accedido a esta invitación, que le hizo el banco privado Dresdner Bank con motivo del lanzamiento de los billetes y monedas de euro a finales de 2001.
En un comunicado, Welteke ha lamentado profundamente que "se haya producido la impresión de que no puedo cumplir con los elevados criterios a los que el Bundesbank, como institución independiente, está obligado". "Lo lamento, especialmente, por las consecuencias para nuestros empleados que cumplen con su obligación en una situación tan difícil para el Bundesbank", añade Welteke.
El banquero decidió reembolsar este lunes la mitad de los 7.610 euros que costaron las cuatro noches que pasó con su esposa, dos de sus hijos y la novia de uno de ellos en el lujoso hotel Adlon de Berlín. El Bundesbank pagó, dieciséis meses después, la otra mitad de la factura al Dresdner, aunque sólo después de que la prensa y el Gobierno de Berlín recibieran cartas anónimas de denuncia.
Como funcionario del Estado, Welteke no puede recibir regalos de terceros y menos de un banco privado, porque el Bundesbank forma parte de la autoridad supervisora germana de banca BaFin, lo que puede causar un conflicto de intereses. El Gobierno de Gerhard Schroeder se ha distanciado de Welteke y ha señalado que no permitiría semejante conducta de uno de sus ministros, aunque no ha querido intervenir directamente en el debate sobre su dimisión.
Las presiones sobre Welteke para que dimita han aumentado hasta el punto de que los medios de comunicación hablan ya de una dimisión inminente del banquero, que también es miembro del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE). El diario sensacionalista Bild ha criticado con dureza el comportamiento de Welteke y le ha ofrecido una vacaciones pagadas de dos semanas para cuatro personas en un hotel de Mallorca, incluido el vuelo, si dimite inmediatamente.
Como funcionario del Estado, Welteke no puede recibir regalos de terceros y menos de un banco privado, porque el Bundesbank forma parte de la autoridad supervisora germana de banca BaFin, lo que puede causar un conflicto de intereses. El Gobierno de Gerhard Schroeder se ha distanciado de Welteke y ha señalado que no permitiría semejante conducta de uno de sus ministros, aunque no ha querido intervenir directamente en el debate sobre su dimisión.
Las presiones sobre Welteke para que dimita han aumentado hasta el punto de que los medios de comunicación hablan ya de una dimisión inminente del banquero, que también es miembro del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE). El diario sensacionalista Bild ha criticado con dureza el comportamiento de Welteke y le ha ofrecido una vacaciones pagadas de dos semanas para cuatro personas en un hotel de Mallorca, incluido el vuelo, si dimite inmediatamente.