L D (EFE) Durante un homenaje al primer lehendakari del Goberino vasco, José Antonio Aguirre, al cumplirse el centenario de su nacimiento, el presidente del PNV ha abogado por iniciar una nueva etapa de "política con mayúsculas" caracterizada por el diálogo y los acuerdos entre las diferentes formaciones.
Josu Jon Imaz consideró cerrada una etapa política basada en la incomunicación y la crispación, dominada por el Gobierno del Partido Popular. Pese a que fue el propio Ibarretxe el primero en responsabilizar a ETA de la masacre del 11-M, ahora Imaz arremete contra el Ejecutivo por haber "utilizado la mentira y la manipulación por intereses electorales".
Imaz sigue apostando por el plan secesionista de Ibarretxe y se declaró "comprometido a practicar el diálogo, el encuentro y el acuerdo para poder tener un acuerdo de convivencia en este país". A este respecto, destacó el protagonismo de los partidos vascos para "negociar el futuro de este país" y reiteró que la decisión sobre un nuevo proyecto recaerá sobre la sociedad vasca. El presidente del PNV reclamó el impulso al debate sobre el proyecto de Ibarretxe y abogó por una "reformulación del Estado español" con una apuesta por el autogobierno que "contemple las diferentes nacionalidades que viven en su seno". Imaz extendió esta demanda a la Unión Europea al abogar por una Europa de carácter federal "en el que todos los pueblos participen en pie de igualdad".
Josu Jon Imaz consideró cerrada una etapa política basada en la incomunicación y la crispación, dominada por el Gobierno del Partido Popular. Pese a que fue el propio Ibarretxe el primero en responsabilizar a ETA de la masacre del 11-M, ahora Imaz arremete contra el Ejecutivo por haber "utilizado la mentira y la manipulación por intereses electorales".
Imaz sigue apostando por el plan secesionista de Ibarretxe y se declaró "comprometido a practicar el diálogo, el encuentro y el acuerdo para poder tener un acuerdo de convivencia en este país". A este respecto, destacó el protagonismo de los partidos vascos para "negociar el futuro de este país" y reiteró que la decisión sobre un nuevo proyecto recaerá sobre la sociedad vasca. El presidente del PNV reclamó el impulso al debate sobre el proyecto de Ibarretxe y abogó por una "reformulación del Estado español" con una apuesta por el autogobierno que "contemple las diferentes nacionalidades que viven en su seno". Imaz extendió esta demanda a la Unión Europea al abogar por una Europa de carácter federal "en el que todos los pueblos participen en pie de igualdad".