L D (EFE) Simpatizantes y dirigentes de Batasuna-ETA hicieron oídos sordos a la prohibición "formal" del Gobierno vasco y sin que la Ertzaintza lo evitara homenajearon al ex preso de ETA Eugenio Etxebeste, Antxon. La nueve provocación de los que aplauden a los asesinos tuvo lugar frente a la Herriko Taberna del barrio donostiarra de Intxaurrondo. La Policía Autonómica sólo actuó para que impedir que el acto se celebrara en el Polideportivo Manteo de Gros primero, y en el frontón del Paseo Zubiaurre de Intxaurrondo, posteriormente.
Aunque el departamento de Interior vasco no lo ha confirmado, en un gesto que supone una mayor burla para las víctimas, el abogado proetarra Jon Enparantza confirmó que sobre el homenaje pesaba la prohibición del Ejecutivo de Ibarretxe.
"Negociación" con la Ertzaintza
El homenaje inicial consistía en la realización de un acto a la una de la tarde en el Polideportivo Manteo del barrio donostiarra de Gros, donde el etarra Antxon iba a pronunciar un discurso y se iba a celebrar una posterior comida, pero a esa hora varias furgonetas y agentes de la Ertzaintza custodiaban el lugar e impedían el acceso a las instalaciones. Según ha trascendido ahora, el alcalde de San Sebastián había denegado el permiso para realizar el homenaje en el Polideportivo. Ante este impedimento, el entorno etarra trasladó el acto al frontón del Paseo Zubiaurre del barrio donostiarra de Intxaurrondo, que también estaba custodiado por agentes de la Policía vasca. Allí se encontraban, además del propio Antxon, dirigentes de la ilegalizada Batasuna-ETA como Arnaldo Otegi, Joseba Permach o Koldo Gorostiaga.