(Libertad Digital) El candidato del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha decidido comenzar formalmente la precampaña desmontando la última propuesta electoral presentada por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero.
Ante la Junta Directiva de su partido, Rajoy instó a Zapatero que aplique ya su promesa electoral y deje de gobernar en aquellos lugares en donde el PSOE no es la lista más votada. "Si no, no me lo creo", añadió Rajoy.
El candidato del PP explicó que, en los últimos días, "se están produciendo anuncios sorprendentes" ya que "hay quien dice exactamente lo contrario de lo que hizo y exactamente lo contrario, que es más grave, de lo que está haciendo en este momento". Rajoy se refería así a Gobiernos conformados en Comunidades Autónomas como Cantabria o en Ayuntamientos como el de León. "Por tanto, espero que el señor Zapatero dé instrucciones para que en todas las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos donde el PSOE no fue la lista más votada inmediatamente deje gobernar a quien tuvo mayor número de votos", dijo Rajoy que añadió: "si no, no me lo creo".
La propuesta del líder del PP y las dudas que exiten en este partido de que Zapatero cumpla su promesa tuvieron pronta respuesta desde el PSOE, donde su portavoz, Jesús Caldera, respondió sacando del baúl la guerra de Irak. Dijo que Zapatero cumplirá su promesa de no formar Gobierno si el PSOE no es la fuerza más votada en las elecciones del 14 de marzo. "Quienes han venido mintiendo diciendo que había armas de destrucción masiva han sido ellos", apuntó Caldera, que criticó al PP porque "en lugar de celebrar ese compromiso, se dedican a atacarnos".
Los periodistas preguntaron a Caldera si el PSOE iba a aceptar el reto de Rajoy y aplicar este compromiso en aquellos lugares donde forma gobierno pese a que no es el partido más votado. Como respuesta, el portavoz socialista utilizó otra famosa promesa electoral y recordó que "igual que Aznar se comprometió a estar ocho años en el Gobierno y Fraga no", su partido podría hacer lo mismo en este caso. "No creo que las situaciones puedan ser equiparables. Gobernar España exige ser el partido más votado", precisó Caldera, que añadió que "es un compromiso para gobernar este país como lo hicimos entre 1982 y 1996 y lo vamos a cumplir".