(Libertad Digital) Juan Carlos Rodríguez Ibarra dijo el lunes que los partidos nacionalistas tendrían que obtener el cinco por ciento de los votos a nivel nacional para tener representación en el Congreso. Horas después, en una rueda de prensa en Mérida, anuncia que retira la propuesta.
El presidente de la Junta de Extremadura anunció que esta iniciativa sería una de las 51 enmiendas que los socialistas extremeños presentarían al documento electoral federal, que se discutirá en la Conferencia Política del PSOE, que tendrá lugar este mismo fin de semana.
Sin embargo, a Ibarra le llovieron las críticas desde su propio partido en apenas unas horas. El primero fue Miquel Iceta, portavoz del PSC, quien dijo que resultaba "imposible" que el PSOE "apruebe ninguna medida destinada a mutilar la representación" de formaciones nacionalistas en el Congreso. El socialista catalán reprochó a Ibarra que "ninguna fuerza con el apoyo suficiente debería ser excluida" y que "propuestas como ésta demuestran hasta qué punto es necesario hacer pedagogía" fuera de Cataluña. En términos similares, el primer secretario del PSC, José Montilla, dijo que, "evidentemente, no compartimos esta opinión, como la mayoría del socialismo democrático. Es una opinión de Ibarra y de un sector minoritario".
Decepcionado con Patxi López
Otro que criticó a Ibarra fue el secretario general del PSE, Patxi López, quien dijo que los socialistas vascos están "radicalmente en contra" de la propuesta y adelantó que el PSE votaría en contra de la misma. Según López, la propuesta de Ibarra "no solo va en contra de la idea de la España plural y diversa que defendemos", sino que "además excluye a cientos de miles de ciudadanos españoles del proyecto común que es España". López incluso afirmó que "no respeta los derechos de las minorías, algo esencial en cualquier sistema democrático". "Lo que los socialistas defendemos es justo todo lo contrario de lo que propone Rodríguez Ibarra", añadió.
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, intentó poner fin a la polémica afirmando que no compartía la idea del presidente extremeño y que, definitivamente, la propuesta de Ibarra no iba a formar parte del programa electoral del PSOE. Ante estas declaraciones de su propio líder, a quien se supone que asesora desde el grupo de "notables" presentado por Zapatero días atrás, Rodríguez Ibarra ha explotado en una rueda de prensa en Mérida y ha anunciado que retira la enmienda que tantas críticas ha suscitado en su propio partido.
Pero la respuesta de Ibarra a su compañero en el País Vasco ha sido contundente: "Yo creía honradamente que los socialistas, por ejemplo el secretario general del PSE Patxi López, estaba preocupado por el Plan Ibarretxe y creía y sigo creyendo que el nacionalismo vasco está haciendo la vida imposible a muchos demócratas en el País vasco, pero él no lo cree".
"Pues viva el nacionalismo"
Así que, una vez más, Ibarra ha mostrado su hartazgo explicando que "como nadie está preocupado, y todo el mundo piensa que es una ventaja que los nacionalistas estén en el Congreso de los Diputados, yo retiro mi propuesta", ha dicho irónicamente el presidente de la Junta de Extremadura antes de exclamar "pues viva el nacionalismo". Para terminar, el presidente extremeño ha lamentado así la acogida de su propuesta: "Creía que el nacionalismo era un problema. Pero a partir de aquí, no pienso escuchar ninguna imbecilidad sobre los problemas del nacionalismo en España, porque a todo el que lo diga le responderé: 'usted es un hipócrita'".
Ibarra confesó su malestar al comprobar que su propuesta recibía tantas críticas, entre ellas, como ha detallado en la rueda de prensa "las de Piqué, Iturgáiz, el consejero de Economía de Castilla y León, de IU-Compromiso por Andalucía, IU del País Vasco, Patxi López y el PNV". En este sentido, añadió: "Estoy encantado de que todos aquellos que, cínicamente, han echado pestes y baba respecto a los nacionalistas, hoy se constituyan en sus máximos defensores, desde el PP a IU pasando por mi compañero Patxi López".