LD (EFE) En el informe de "Estabilidad Financiera", publicado este lunes por el organismo supervisor, se advierte de que existe el riesgo de que se produzca una "gradual y ordenada" bajada de precios de la vivienda, como la registrada a principios de los años noventa, ya que actualmente están algo "sobrevalorados".
"El buen comportamiento relativo de nuestra economía en el periodo reciente –asegura el Banco de España– no debe ocultar que los riesgos a medio plazo persisten", pues el mayor endeudamiento de las familias y las empresas les hace cada vez más vulnerables a perturbaciones adversas en su renta, como podría ser una subida de tipos de interés.
Ante este entorno, el organismo dirigido por Jaime Caruana recomienda a las entidades "una estricta política de admisión, concesión y seguimiento del crédito" y recuerda que en anteriores ciclos económicos similares, "el crecimiento muy elevado del crédito se tradujo en sustanciales aumentos de la morosidad". Sin embargo, esa tendencia no se vislumbra por el momento en las cuentas de las entidades españolas, que en el primer semestre situaron en unos 8.000 millones de euros el volumen de créditos de dudoso cobro, tras experimentar un incremento muy inferior al de semestres anteriores.
Según los datos del Banco de España, en los seis primeros meses del año se observó una ligera moderación en el ritmo de expansión de la financiación para la compra de vivienda, aunque se produjo una aceleración del crédito concedido para la construcción y promoción inmobiliaria, que aumentó un 30 por ciento.
"El buen comportamiento relativo de nuestra economía en el periodo reciente –asegura el Banco de España– no debe ocultar que los riesgos a medio plazo persisten", pues el mayor endeudamiento de las familias y las empresas les hace cada vez más vulnerables a perturbaciones adversas en su renta, como podría ser una subida de tipos de interés.
Ante este entorno, el organismo dirigido por Jaime Caruana recomienda a las entidades "una estricta política de admisión, concesión y seguimiento del crédito" y recuerda que en anteriores ciclos económicos similares, "el crecimiento muy elevado del crédito se tradujo en sustanciales aumentos de la morosidad". Sin embargo, esa tendencia no se vislumbra por el momento en las cuentas de las entidades españolas, que en el primer semestre situaron en unos 8.000 millones de euros el volumen de créditos de dudoso cobro, tras experimentar un incremento muy inferior al de semestres anteriores.
Según los datos del Banco de España, en los seis primeros meses del año se observó una ligera moderación en el ritmo de expansión de la financiación para la compra de vivienda, aunque se produjo una aceleración del crédito concedido para la construcción y promoción inmobiliaria, que aumentó un 30 por ciento.