L D (EFE) En la sesión de control al Gobierno en el pleno del Congreso, Llamazares preguntó al presidente si mantiene "la sesuda formulación de guerra anticipatoria" en la posguerra de Irak, un término que atribuyó al "complejo de inferioridad" de Aznar frente a EEUU, porque "es una mala traducción del inglés, del término guerra preventiva de su amigo Bush".
"Su política exterior oscila entre el complejo de inferioridad con respecto a la política exterior norteamericana y la mentira a los ciudadanos", señaló el líder de IU, quien no consideró "muy oportuno" utilizar este término "cuando se está fracasado claramente en Irak, donde usted ha aportado destrucción, desestabilización de la zona y más guerra".
"Su política exterior oscila entre el complejo de inferioridad con respecto a la política exterior norteamericana y la mentira a los ciudadanos", señaló el líder de IU, quien no consideró "muy oportuno" utilizar este término "cuando se está fracasado claramente en Irak, donde usted ha aportado destrucción, desestabilización de la zona y más guerra".
El líder de IU añadió que "lo peor de su política exterior es que está mintiendo a los ciudadanos cuando habla de llamar a consultas –en referencia a la salida de Irak del personal diplomático–, cuando en realidad nos encontramos ante una política de evacuación, porque somos fuerza ocupante y estamos en una situación de inseguridad". En este sentido, Llamazares sugirió a Aznar que siga llamando a consultas, "pero no sólo al personal civil, sino a todos los militares desplegados de manera ilegal en la guerra de Irak".
Aznar: "Es mi deber intentar anticipar una acción terrorista"
"El Gobierno no ha apoyado ninguna guerra anticipatoria", afirmó apelando a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU o a los informes de los inspectores de Naciones Unidas sobre las armas de destrucción masiva del régimen de Sadam Husein. En todo caso, consideró que, frente a la "comprobación y la posibilidad de una acción terrorista contra nuestro país o contra compatriotas nuestros, no sólo es legitima una intervención anticipatoria, sino que es obligada, y lo voy a defender en todo caso".
"Si tengo noticias de que se puede producir una acción contra intereses de España desde dentro o desde fuera, haremos lo posible por impedirlo", insistió Aznar, que preguntó a Llamazares "cuál sería su posición" en una situación similar, sobre lo cual aventuró que podría ser "esperar a que se produzca un atentado no para intervenir, sino para lamentarlo". El presidente explicó que defiende "el plan estratégico de la OTAN, de la UE y de España, y procuro defender el sentido común", y aconsejó a Llamazares que "puede estar en desacuerdo con los tres primeros planes, pero al último, al sentido común, le conviene acercarse aunque sólo sea de vez en cuando".