L D (EFE) "A partir de mañana (por este martes), empezaremos a repatriar a los colaboradores internacionales y veremos cómo seguimos aportando nuestra ayuda con nuestros trabajadores iraquíes", dijo Gassmann.
Previamente, había indicado que "tras el atentado (contra la sede del CICR en Bagdad), ha quedado claro que no podemos seguir como hasta ahora trabajando con 35 colaboradores extranjeros".
Previamente, había indicado que "tras el atentado (contra la sede del CICR en Bagdad), ha quedado claro que no podemos seguir como hasta ahora trabajando con 35 colaboradores extranjeros".
Señaló, sin embargo, que la Cruz Roja "tiene un mandato que cumplir" en ese país árabe: "Encargarnos de los presos de guerra iraquíes y ayudar a la población de Irak". En cuanto a las víctimas del CICR que ha causado el atentado de este lunes por la mañana, Gassmann dijo que había visitado el hospital por la mañana y que allí "hemos visto doce muertos, dos de ellos iraquíes, un ingeniero y un guarda que se encontraban delante del edificio". Sobre el número de heridos dijo no poder ofrecer cifras exactas.
No pidieron protección a la Coalición aliada
A la pregunta de cómo se explica un atentado terrorista contra la organización que representa, Gassmann contestó: "Puedo imaginarme que quienes han hecho esto están en contra de todo lo que sea extranjero. No diferencian, todo lo que no es iraquí se equipara a las tropas de ocupación". En la entrevista, que emitió ARD en su telediario de las 20.00 h. (hora española), Gassmann reconoció que la Cruz Roja "ha sido quizás algo ingenua" al creer que, por no tener nada que ver con las tropas de la coalición o con la ONU, no serían atacados.
Por ello, el CICR no pidió protección de las tropas aliadas, pues contaba con que "la oposición no nos viera como parte de la fuerza de ocupación, sino verdaderamente como una organización puramente humanitaria". Señaló que muy probablemente la Cruz Roja seguirá renunciando a la protección de las tropas aliadas en un futuro. En cuanto a cómo piensa seguir realizando su trabajo, Gassmann estimó que la Cruz Roja tendrá que limitar considerablemente su labor en el campo de los servicios sociales, como puede ser el suministro de agua o el reparto de medicamentos.
Ahora, tendrá que encargarse de ello una organización iraquí, "el problema es que no existe una administración civil que pueda realizar tales tareas, aún no", concluyó el delegado de la Cruz Roja.