L D (EFE) La reforma supondrá para España 2.752 millones de euros más respecto al sistema actual entre 2005 y 2013, según los cálculos estimativos del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete. De esta cantidad, 1.100 millones de euros son fondos pendientes de la Agenda 2000 (penúltima vez que se reformó la PAC), como por ejemplo medidas para el sector lácteo, por lo que resta un margen bruto de 1.652 millones de euros.
La "modulación" o rebaja de las ayudas para financiar el desarrollo rural, que se aplicará a partir de 2005 supone un recorte de 1.038 millones de euros. Esta deducción se ve compensada con un montante de 1.346,7 millones de euros más para el desarrollo rural, debido al reparto con criterios de cohesión, que da una diferencia favorable para España de unos 310 millones de euros.
El dinero nuevo para desarrollo rural (1.346,7 millones de euros) se complementará con fondos nacionales hasta alcanzar un total de 1.923,8 millones de euros entre 2005 y 2013. En trigo duro , España recibirá durante ese período 85 millones menos, mientras que en arroz obtendrá 698,4 millones de euros más.
La ayuda a frutos secos reportará a España fondos por valor de 68,6 millones de euros anuales, con lo que en total percibirá 617,4 millones de euros más entre 2005 y 2013. En leche , recibirá 1.582,7 millones de euros de los cuales 1.100 millones ya fueron incluidos en la Agenda 2000.
España, plenamente satisfecha
Arias Cañete ha dicho que la reforma permite "mantener la actividad agraria en todo el territorio y en todos los sectores", por lo que el acuerdo cubre y satisface plenamente las expectativas españolas. El ministro ha destacado que se trata de una reforma "favorable" en términos financieros que ha cubierto todos los objetivos que se había marcado España, entre ellos, mantener la actividad agraria y ganadera en todo el territorio español, sin que se produzca ningún abandono. Además, según ha dicho, se ha logrado que no haya desacoplamiento total de las ayudas, que exista cohesión a la hora de distribuir los fondos de modulación y que se mejoren todas las regulaciones comunes de mercado en lo que se respecta a arroz, trigo duro, frutos secos, cereales y lácteo.
Según el ministro, "ha habido avances muy importantes, gracias a que hemos seguido una estrategia de establecer alianzas con países como Francia, Portugal, Luxemburgo o Irlanda desde el principio de esta negociación, que nos ha permitido no estar en solitario y conformar una mayoría suficiente en el final de la negociación".
La "modulación" o rebaja de las ayudas para financiar el desarrollo rural, que se aplicará a partir de 2005 supone un recorte de 1.038 millones de euros. Esta deducción se ve compensada con un montante de 1.346,7 millones de euros más para el desarrollo rural, debido al reparto con criterios de cohesión, que da una diferencia favorable para España de unos 310 millones de euros.
El dinero nuevo para desarrollo rural (1.346,7 millones de euros) se complementará con fondos nacionales hasta alcanzar un total de 1.923,8 millones de euros entre 2005 y 2013. En trigo duro , España recibirá durante ese período 85 millones menos, mientras que en arroz obtendrá 698,4 millones de euros más.
La ayuda a frutos secos reportará a España fondos por valor de 68,6 millones de euros anuales, con lo que en total percibirá 617,4 millones de euros más entre 2005 y 2013. En leche , recibirá 1.582,7 millones de euros de los cuales 1.100 millones ya fueron incluidos en la Agenda 2000.
España, plenamente satisfecha
Arias Cañete ha dicho que la reforma permite "mantener la actividad agraria en todo el territorio y en todos los sectores", por lo que el acuerdo cubre y satisface plenamente las expectativas españolas. El ministro ha destacado que se trata de una reforma "favorable" en términos financieros que ha cubierto todos los objetivos que se había marcado España, entre ellos, mantener la actividad agraria y ganadera en todo el territorio español, sin que se produzca ningún abandono. Además, según ha dicho, se ha logrado que no haya desacoplamiento total de las ayudas, que exista cohesión a la hora de distribuir los fondos de modulación y que se mejoren todas las regulaciones comunes de mercado en lo que se respecta a arroz, trigo duro, frutos secos, cereales y lácteo.
Según el ministro, "ha habido avances muy importantes, gracias a que hemos seguido una estrategia de establecer alianzas con países como Francia, Portugal, Luxemburgo o Irlanda desde el principio de esta negociación, que nos ha permitido no estar en solitario y conformar una mayoría suficiente en el final de la negociación".