(Libertad Digital) La larga sesión en la comisión de Defensa del Congreso ha tenido un punto de mayor intensidad en el turno de respuestas tras completar las intervenciones. Trillo destaca que ha hecho un esfuerzo de documentación para que los diputados tuvieran los datos disponibles en respuesta a las exigencias de Caldera. Sostiene que el debate de los gastos de defensa no debe cerrarse pero sí el de la falta de medios como causa del accidente del Yakolev-42. Para PSOE, CiU y CC tuvo palabras de agradecimiento por haber expresado su apoyo a las Fuerzas Armadas. Fue el primer ataque, por omisión, a Izquierda Unida.
También en respuesta a Caldera, Trillo insistió en que si Noruega suspendió este tipo de vuelos de alquiler fue porque recibió quejas por escrito. Explica Trillo que en el caso de España no se han conocido quejas anteriores al accidente como sostuvo con insistencia en su primera intervención. Para explicar la “concertación de confianzas”, el ministro puso el ejemplo de los viajes que los parlamentarios hacen al extranjero sin cuestionarse la seguridad de los vuelos porque se fían de las garantías. Con ello, Trillo vuelve a hacer hincapié a que el Yakolev-42 era un “buen avión” a juzgar por las inspecciones realizadas tan sólo un mes antes del trágico accidente.
También confirmó que el CNI hace un seguimiento de estas operaciones militares en el extranjero para responder a una pregunta realizada por el portavoz de CC, Luis Mardones. Explica también que las preguntas del PSOE de abril sobre la seguridad de los vuelos se referían a un Tupolev, no a un Yakolev, y a una compañía distinta a la que ahora está en cuestión. Por ello, desmarca del caso esta pregunta a la que se agarra el PSOE para denunciar la pasividad de Trillo. Pese a todo, sin excesiva crítica.
Pero el ministro reservaba todo su enfado para IU. No sólo hacia Felipe Alcaraz sino, sobre todo, hacia Gaspar Llamazares. Sobre las tan mencionadas fotografías publicadas en medios de comunicación, Trillo critica a Alcaraz por basar en ellas su exigencia de dimisión. Le responde: “Yo no miento y su señoría lo sabe”. Explica que “el vuelo de las fotos no es un vuelo de transporte de tropa sino un vuelo en el que se han habilitado algunos pasajes. No es el mismo que el accidentado ni tiene que ver con lo que estamos debatiendo”.
Y tras Alcaraz le tocó a Llamazares. Trillo no ahorró en críticas: “Señor Alcaraz, su líder anticipó mi condena, antes de querer conocer el resultado de las investigaciones piden mi dimisión sin siquiera escucharme”. Además, destacó que IU no ha apoyado una sola intervención de las Fuerzas Armadas en el exterior y sí ha criticado el aumento de gasto para Defensa. Su líder, añade Trillo, que siquiera “ha aparecido un momento esta tarde”, es el que pide mi dimisión. Concluye el ministro con más dureza y les reprocha pues, su “poca legitimidad moral” para pedir responsabilidades.
También en respuesta a Caldera, Trillo insistió en que si Noruega suspendió este tipo de vuelos de alquiler fue porque recibió quejas por escrito. Explica Trillo que en el caso de España no se han conocido quejas anteriores al accidente como sostuvo con insistencia en su primera intervención. Para explicar la “concertación de confianzas”, el ministro puso el ejemplo de los viajes que los parlamentarios hacen al extranjero sin cuestionarse la seguridad de los vuelos porque se fían de las garantías. Con ello, Trillo vuelve a hacer hincapié a que el Yakolev-42 era un “buen avión” a juzgar por las inspecciones realizadas tan sólo un mes antes del trágico accidente.
También confirmó que el CNI hace un seguimiento de estas operaciones militares en el extranjero para responder a una pregunta realizada por el portavoz de CC, Luis Mardones. Explica también que las preguntas del PSOE de abril sobre la seguridad de los vuelos se referían a un Tupolev, no a un Yakolev, y a una compañía distinta a la que ahora está en cuestión. Por ello, desmarca del caso esta pregunta a la que se agarra el PSOE para denunciar la pasividad de Trillo. Pese a todo, sin excesiva crítica.
Pero el ministro reservaba todo su enfado para IU. No sólo hacia Felipe Alcaraz sino, sobre todo, hacia Gaspar Llamazares. Sobre las tan mencionadas fotografías publicadas en medios de comunicación, Trillo critica a Alcaraz por basar en ellas su exigencia de dimisión. Le responde: “Yo no miento y su señoría lo sabe”. Explica que “el vuelo de las fotos no es un vuelo de transporte de tropa sino un vuelo en el que se han habilitado algunos pasajes. No es el mismo que el accidentado ni tiene que ver con lo que estamos debatiendo”.
Y tras Alcaraz le tocó a Llamazares. Trillo no ahorró en críticas: “Señor Alcaraz, su líder anticipó mi condena, antes de querer conocer el resultado de las investigaciones piden mi dimisión sin siquiera escucharme”. Además, destacó que IU no ha apoyado una sola intervención de las Fuerzas Armadas en el exterior y sí ha criticado el aumento de gasto para Defensa. Su líder, añade Trillo, que siquiera “ha aparecido un momento esta tarde”, es el que pide mi dimisión. Concluye el ministro con más dureza y les reprocha pues, su “poca legitimidad moral” para pedir responsabilidades.